El estrés, como el bostezar, puede ser contagioso, señala un estudio realizado por científicos alemanes. Alguien que está relajado puede estresarse al ver a otra persona en una situación de tensión, indicaron los expertos del Instituto Max Planck de Neurociencias, con sede en la ciudad de Leipzig, y de la Universidad Técnica de Dresde.

El solo hecho de observar basta para que el propio cuerpo secrete la hormona del estrés, el cortisol. Los especialistas califican este fenómeno de estrés empático, según consigna la agencia noticiosa germana DPA.

Los autores de la investigación pidieron a un grupo de personas que resolvieran cálculos matemáticos de forma mental y al mismo tiempo mantuvieran entrevistas de trabajo, situación que significó una presión que despertó el estrés. Mientras tanto, otro grupo de personas se limitaba a observar como sudaban tinta para cumplir con la doble prueba.

Los científicos comprobaron que en el 26% de los integrantes de este segundo grupo, aumentó la presencia de cortisol. Dicho incremento alcanzaba a veces el 40% en personas que tenían a su pareja sometiéndose a la prueba, y solía rondar el 10% en quienes no tenían a ningún ser querido como conejillo de indias.

Asimismo, se demostró que el estrés en los observadores era más alto cuando miraban la acción directamente que al hacerlo a través de un monitor.