Pasa en las películas.
Spencer White es dueño de un auto igual al de la famosa serie de películas, y no pudo con la tentación.
White reside en la localidad de Saugus, Massachusetts, y era un niño cuando vio la primera película de la serie, estrenada en 1985. Quedó fascinado por la obra y se convirtió en un verdadero seguidor de la saga. Su afición prosiguió más allá de la niñez, y actualmente es feliz poseedor de un automóvil DeLorean modelo 1982 de acero inoxidable, el mismo que en los films funciona como máquina del tiempo.
Según consigna ABC, el hombre protagonizó recientemente una incidencia de tránsito al querer imitar a Marty McFly (protagonista de las películas) en el mundo real. Según relata, conducía por una carretera local y comenzó a sentir la tentación de llevar el velocímetro a 88 millas (unos 140 km), la velocidad que en la ficción necesita el auto para lanzarse a viajar por el tiempo.
White venía resistiendo el impulso de pisar el acelerador cuando recibió un estímulo inesperado: el de su propia madre, que viajaba en el asiento de acompañante y es también una gran fanática de "Back to the future".
Obediente, el conductor aceleró hasta llegar al "número mágico", y de inmediato advirtió que tenía a la policía detrás. En su relato, cuenta que el policía que le hizo una multa por 400 dólares, también era aficionado a las películas y de inmediato se dio cuenta de lo que estaba pasando. "Notó lo singular que era multar a un hombre circulando a 88 millas con un DeLorean", explica, agregando que ambos se tomaron con humor el incidente.
White dice no estar arrepentido del hecho, y guarda la multa como un verdadero trofeo, seguro de que difícilmente algún otro fan de la película pueda presumir de semejante souvenir.


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