El Poder Ejecutivo promulgó la ley de refinanciación de deudas al Banco de Previsión Social (BPS), que "busca que las empresas que han tenido dificultades puedan regularizarse", explicó Ernesto Murro, ministro de Trabajo y Seguridad Social.
El jerarca aclaró que "no es una amnistía", y recordó que experiencias similares se dieron en 2006 y 2013, que permitieron la regularización de 60.000 empresas y 500.000 trabajadores.
La ley se aplica a deudas por aportes personales desde 2013 a abril de 2018, y permite refinanciar aportes personales hasta en 36 meses (multas y recargos hasta en 72 cuotas) y patronales hasta en 72 meses. Actualmente, los aportes personales solo se pueden refinanciar por cheques diferidos y los patronales únicamente en 36 cuotas.
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