La jueza bosnia Enisa Bilajac, de 35 años, fue captada por la cámara de un fotógrafo mientras tomaba el sol completamente desnuda en su oficina.
El paparazzo entregó las imágenes a medios locales y desató la controversia. Las autoridades iniciaron una investigación y decidieron en primera instancia separar del cargo a la jueza. Los motivos eran dos: estaba usando sus oficinas -poco tiempo antes de presidir una sesión- para tomar sol sin ropa, y además dañaba la imagen de la institución.
Según informó el Mail, la mujer argumentó que su oficina estuvo cerrada con llave y que se encontraba haciendo ejercicios, para lo que había pedido autorización previamente.
Finalmente, la Corte Suprema concluyó que no había actuado incorrectamente y que sus acciones no habían afectado su credibilidad profesional, por lo que su puesto le fue restituido.