Cuando apenas pasen unos días de su cumpleaños 24, el fernandino Thomas Silva Coussan se convertirá en el primer ciclista uruguayo de la historia en llegar al World Tour, tras ser contratado por XDS Astana desde 2026 con dos años de contrato.

Es un hecho sin precedentes para el ciclismo nacional, comparable a que un futbolista firme en un gigante europeo o que un atleta alcance la élite mundial.

Su temporada 2025, como corredor de Caja Rural-Seguros RGA, lo confirmó como una gran realidad en el mundo del pedal y la combinación de resultados, regularidad, crecimiento en Europa y madurez notable lo colocaron en el radar de equipos de máximo nivel.

Su victoria en el Campeonato Nacional de Ruta 2025, su participación en la Vuelta a España, su presencia en clásicas y carreras de prestigio, y su proyección a largo plazo, lo consolidaron como un deportista a seguir en cada paso que da.

La temporada del salto

Thomas Silva, al ser entrevistado por FútbolUy, comenzó evaluando su 2025 como el año que lo catapultó definitivamente: “La verdad que estoy muy contento con la temporada que completé. A principio de año nos habíamos planteado igualarla o superar la del 2024 en puntos UCI y así fue”.

“Quería conseguir alguna victoria y comencé el año ganando el campeonato nacional. Después corrí toda la temporada con la bandera de Uruguay en Europa, así que muy feliz que eso sucediera”, repasó con un dejo de nostalgia.

Su participación en la Vuelta a España, marcó un antes y un después para él, un mojón que marcó el futuro: “Fue impresionante, mi primera gran vuelta.”

“Fue una experiencia inolvidable y más aún porque mi padre, mi madre y mi mujer me acompañaron toda la carrera. Eso lo hizo todavía más especial”, detalló del valor agregado de sus afectos acompañándolo.

El salto al Astana

Su llegada al World Tour ocurrió de forma natural tras dos temporadas en pleno ascenso: “Hubo contactos con diferentes equipos, pero surgió la posibilidad de ir al Astana, se arregló rápidamente y estoy muy contento”.

“Tengo contrato con Caja Rural hasta el 31 de diciembre y desde el 1º de enero paso a ser corredor de ellos”, explicó y anticipó: “Ya tuvimos una mini concentración para conocernos y ver el material. Para mí es todo nuevo, es mi primer equipo World Tour, pero estoy muy contento, ilusionado y con muchas ganas”.

Sobre sus sueños de correr un Tour de Francia o un Giro de Italia, Silva mantiene los pies en la tierra: “El Tour es la mejor carrera del mundo y obviamente algún día me gustaría estar, pero hay que ir paso a paso”.

“No me quiero apresurar. Ya hablamos un poco del calendario 2026, pero veremos qué está a nuestro alcance”, expresó sabiendo que hay un camino a recorrer.

También deja claro que la celeste lo acompaña adonde vaya: “Siempre me gusta mucho defender a Uruguay. Siempre que he podido, lo he hecho. Las competencias en las que pueda estar dependerán del calendario, pero si todo cuadra, estoy 100% dispuesto”.

Silva apunta al ciclo olímpico (Odesur, Panamericanos y el sueño de los Juegos Olímpicos), algo que ahora deberá matizar aún más con las exigencias de su equipo.

La historia de Thomas Silva ya es fundacional: abrió una puerta que durante décadas parecía cerrada. Lo que viene para él no es solo una carrera en la élite, sino un camino que puede inspirar a toda una generación de ciclistas uruguayos.