Según informó este martes el diario británico ‘The Times’, el torneo de Wimbledon evalúa introducir el tie break en el quinto set, tal como en el resto de los torneos, a los efectos de evitar partidos de excesiva duración como el que el sudafricano Kevin Anderson le ganó al estadounidense John Isner luego de seis horas y media.
El citado partido semifinal, que retrasó algunas horas el encuentro de Novak Djokovic y Rafael Nadal al punto de que quedara trunco a las 11 de la noche y siguiera al día siguiente, se definió con un 26-24 en el quinto set, lejos del 70-68 que el propio Isner protagonizó frente al francés Nicolas Mahut en 2010, también en Wimbledon, tras 11 horas.
Anderson no pudo recuperarse al 100% para la final del domingo, en la que cayó con Djokovic. “Estos partidos pueden ser perjudiciales para la salud de los jugadores”, explicó el sudafricano, quien manifestó la necesidad de introducir el tiebreak en Wimbledon.
Esa decisión ya fue tomada en el US Open y la Copa Davis para evitar partidos maratónicos, pero de momento no han modificado la obligatoriedad de dos games de diferencia para ganar el quinto set Wimbledon, Roland Garros ni el Australian Open. El Grand Slam londinense tomará la decisión en noviembre.
“A lo mejor hay un término medio en el que podemos incluir un 'tie break' en el 12 iguales. Creo que sería un balance justo. Si un partido llega hasta ahí no creo que sea necesario continuar. Las veces que se llega hasta ese punto son muy raras. Creo que sería una manera de proteger la salud de los jugadores”, opinó Anderson.
Como el triunfo del sudafricano sobre Isner hizo retrasar el de Djokovic sobre Nadal, que terminó el sábado con un apretado 10-8 en la quinta manga, la final femenina comenzó dos horas después de lo previsto.