Durante los últimos meses la vedette Mónica Farro y su esposo, el futbolista Enrique Ferraro, viven una intermitente historia de amor. La uruguaya que triunfa en Argentina contó en cuanto programa de chimentos exista que la distancia afectó negativamente su matrimonio.

Las historias de rupturas rinden tanto como las de reconciliaciones, así que Farro tuvo una gran cantidad de minutos de aire merced a sus vaivenes amorosos.

Estos días ella había dado casi por fallecido al matrimonio, e incluso se había manejado la posibilidad de iniciar un romance con un concejal de San Miguel, cuenta Primiciasya.

Además desmintió otro amorío, esta vez con un productor de Ideas del Sur. "En Ideas del Sur hay muchos chicos que trabajan, que nos cuidan, que nos llaman constantemente por el tema de los ensayos. Pero no pasa nada, siempre soy muy cariñosa con la gente, los abrazo, tal vez por eso hablan".

Ahora es "Quique" Ferraro quien se acerca a la vedette, y viajará en los próximos días para estar con ella. Parece que tantas habladurías de romances afectaron al deportista.

"Después de ese día hablamos mucho, me dijo que me extrañaba, yo le dije que lo necesitaba y el próximo lunes es probable que venga para estar conmigo en el estreno de la obra", dijo a Intrusos.