En los últimos tiempos, nuevos hábitos de moda han alarmado a las autoridades niponas. Tras el auge del Tampodka, consistente en utilizar tampones embebido en vodka, y el arribo del Eyeballing (verter bebidas alcohólicas en los ojos), llega el Oculolinctus.
Esta nueva y peligrosa práctica consiste en lamer el glóbulo ocular de una persona, por lo general en el marco del juego erótico previo a las relaciones sexuales. Los que lo han probado aseguran que proporciona una sensación "tan agradable como darse un beso de lengua", consigna el periódico español ABC.
Los médicos y oftalmólogos nipones están alarmados por el elevado número de casos de jóvenes que están llegando a sus consultas con infecciones oculares propias de otras zonas del cuerpo, heridas en la córnea y todo tipo de irritaciones en los ojos. Las cifras son sorprendentes ya que uno de cada tres estudiantes japoneses reconoce haber practicado el oculolinctus en alguna ocasión.
La Asociación de Oftalmología japonesa advierte que lamer el globo ocular provoca una transmisión de bacterias y de materiales abrasivos que se encuentran en la saliva y que causan lesiones graves en los globos oculares.