Hasta hace poco Larissa Riquelme era famosa sólo en suelo paraguayo. Pero llegó el Mundial de Sudáfrica y decenas de miles de atentas cámaras fotográficas buscando en las tribunas momentos dignos de retratar.

Así fue como encontraron a Larissa, alentando a su selección con las dos manos en alto, y el celular a buen resguardo entre sus pechos. Pronto la foto comenzó a recorrer los medios de todo el mundo y se la calificó como "la más linda del Mundial" o "la novia del Mundial".

Larissa posó para la revista Hombre, demasiado ligera de ropas como para publicar aquí las imágenes, y también se tomó el atrevimiento de manifestar su apoyo a la selección de Serbia con una producción de fotos para un periódico de ese país. Los serbios, eliminados antes del pasaje a octavos, se quedaron con una bella imagen de consuelo.