Un equipo de desactivación de explosivos de la Guardia Civil destruyó en la madrugada del pasado jueves una granada de mano de origen francés, fabricada en tiempos de la Primera Guerra Mundial.

Según consigna el periódico ABC, el artefacto estaba dentro de un envío de papas recibido por una empresa sita en las afueras de la ciudad de Burgos.

Los responsables del establecimiento dieron aviso a la Policía Nacional y esta a su vez se comunicó con la Guardia Civil, que envió a sus técnicos para analizar la situación.

Los expertos analizaron el artefacto y concluyeron que se trataba de una granada de mano de origen francés AB incendiaria y fumígena modelo 1916, con espoleta Brillant.

A continuación, procedieron a su traslado a un paraje adecuado para su posterior destrucción de manera controlada.

En un comunicado recogido por el mencionado periódico, la Guardia Civil describe al explosivo como "de gran peligrosidad", por su "carga agresiva de fósforo blanco".