¿Tenés piscina en tu casa? No te pierdas estos cinco tips para su correcto cuidado

Cuidar y mantener el agua de la piscina, cualquiera sea su tamaño, es imprescindible para evitar su degradación, la formación de algas, así como eventuales complicaciones de salud.

Recoger con un saca hojas toda la materia que haya ingresado a la piscina, como ramas, hojas y residuos, es siempre el primer paso. El filtrado también es fundamental y la frecuencia de estas tareas se ajustará según cada caso. Por otra parte, y en paralelo, es fundamental realizar un tratamiento con productos químicos, a los efectos de evitar la proliferación de algas que lleven el agua a un mal estado.

Acá podés encontrar cinco tips que vale la pena considerar.

1. Medir y mantener regulados los valores de pH 

Tener el pH en un valor neutro es clave para mantener en perfectas condiciones la propia piscina y el agua. Esto es con valores entre 6,8 y 7,4 puntos.

Si el agua se encuentra en condiciones de alcalinidad o acidez fuera de los parámetros de pH adecuados, sucede que el cloro, los oxidantes, los clarificantes y cualquiera de los productos que se apliquen, pierden su efectividad.

Lo recomendable es medir frecuentemente este valor, por lo menos una vez por semana, y si aparece alguna variación realizar los ajustes correspondientes. Por ejemplo, con un regulador de pH.

2. Utilizar tratamientos con productos

Uno de los métodos recomendados y utilizados con mayor frecuencia es la aplicación de pastillas triple acción (cloro, clarificante y alguicida), en combinación con cloro shock como refuerzo.

Se trata de aplicaciones semanales de pastillas, complementadas con el agregado de cloro shock en polvo en el caso de uso intensivo, muchas lluvias o eventos extraordinarios.

Lo que se busca es mantener un nivel aproximado a cinco partes por millón de cloro libre para actuar ante el ingreso de carga orgánica.

También se puede emplear cloro líquido, utilizado con frecuencia en piscinas olímpicas, piscinas cerradas calefaccionadas o piscinas grandes de clubes con alta afluencia de público y gran cantidad de litros de agua.

Si se busca una opción libre de cloro existen algunos tratamientos de productos con base en amonios cuaternarios con poder desinfectante. Utilizan una mezcla de alguicidas que, como compuesto, contienen uno de estos amonios, en combinación con algún otro tipo de oxidante, como lo es el oxígeno líquido (peróxido de hidrógeno), en diferentes combinaciones. 

3. Limpiar todo el equipamiento filtrante

Limpiar la bomba y la arena del filtro adecuadamente asegura un filtrado con excelentes resultados. También hay que mantener el canasto del skimmer y la trampa de pelos de la bomba libres de restos.

Residuos que caen a la piscina de árboles, calles, plantas y cortes de pasto, entre otros eventos, inciden directamente en la frecuencia con la que se debe realizar el mantenimiento y limpieza de los equipos. El skimmer se debe vaciar de forma cotidiana, siempre después de una tormenta, vientos fuertes o del corte de pasto cercano.

En cuanto al filtro de arena, se tiene que mantener limpio y desobstruido, ya que la propia acción de este y la retención de las partículas filtradas van poco a poco tupiéndolo y evitando un buen funcionamiento del sistema.

En plena temporada, como mínimo una vez a la semana se debe realizar un lavado, buscando que quede nuevamente en condiciones de cumplir su función. En esta nota se puede ver el paso a paso.

4. Recuperar el agua de la piscina

En la mayoría de los casos es mucho más económico y rápido que vaciar, limpiar y volver a llenar la piscina.

Primero se debe realizar el trabajo manual, quitando los residuos con saca hojas de todas las partes, incluido el fondo de la piscina. Luego, cepillar las paredes y el fondo de la piscina.

Es necesario controlar los niveles de pH y, posteriormente, se requiere una hipercloración, es decir, realizar un golpe de cloro con una dosis varias veces mayor a la del mantenimiento para eliminar todas las algas vivas del agua.

A continuación, se debe aplicar una dosis de clarificante o floculante para precipitar al fondo todas las algas muertas y partículas en suspensión, a los efectos de poder aspirarlas y retirarlas del circuito de agua.

5. Cuidar las piscinas pequeñas  

Para el caso de las piscinas pequeñas de menos de 1.000 litros sin filtro ni bomba, se pueden tomar ciertos recaudos y realizar la aplicación de algún producto para prolongar la vida útil del agua como un desinfectante para piscinas totalmente inocuo.

Como siempre, se debe llenar la piscina con agua corriente potable y luego aplicarle la dosis indicada del desinfectante. Diariamente hay que retirar toda la suciedad, utilizando para ello un saca hojas de malla fina.

De esta forma, con el producto y la limpieza diaria se extenderá la vida útil del agua sin algas.

Una columna del equipo de PROlimpio.  

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