El director de Equipos Consultores, Ignacio Zuasnabar, fue uno de los oradores de un desayuno organizado por el Centro de Estudios para el Desarrollo (CED), donde evaluó la aprobación de la gestión del gobierno y analizó el índice de popularidad del presidente Yamandú Orsi, el expresidente Luis Lacalle Pou y otros líderes políticos.
“Los únicos dos líderes de saldo positivo son Orsi y Lacalle”, dijo Zuasnabar al presentar el gráfico sobre el índice de popularidad.
En efecto, en cuanto al presidente Orsi, reúne un 46% de simpatía, un 28% de valoraciones neutras y un 21% de antipatía, lo que da un saldo neto de +25.
Lacalle Pou, por su parte, cuenta con una simpatía del 49%, un 19% de opiniones neutras y un 31% de antipatías, reuniendo un saldo neto de +18.
El sociólogo señaló que el escenario es “muy contrastante” entre los líderes políticos, con dos figuras “muy distanciadas de todo el resto, y una en cada bloque político”. “Hay dos líderes políticos claramente despegados”, apuntó después.
El director de Equipos Consultores también abordó la evaluación de los uruguayos de la gestión de Orsi, a partir de la encuesta presentada este lunes. El estudio determinó que un 43% de los votantes aprueba la gestión del presidente, el 25% lo desaprueba, mientras que hay un 28% que “ni aprueba ni desaprueba”, y un 4% que no sabe o no contesta.
“Cuando miramos la evolución, en términos de aprobación hay una estabilidad, pero de a poco empieza a crecer la desaprobación”, señaló. “Es una buena foto para el presidente, pero con alguna señal de erosión”, afirmó luego.
Según afirmó Zuasnabar, Orsi sostiene “un alineamiento fuerte” de los votantes propios, por lo que las modificaciones se explican por “un cambio de postura de los votantes de la oposición”. “Esto no le quita relevancia al aumento global de la desaprobación de Orsi, pero en algún sentido, tiene una explicación política mucho más clara. Para un gobierno, es mucho más preocupante cuando pierde peso en el centro del electorado o en la base electoral propia que cuando pierde peso en la base electoral del adversario”, señaló.
Así las cosas, el sociólogo dijo también que “no se puede calificar todavía este deterioro de Orsi como una caída”, debido a la comparación con las expectativas con las que comenzó el gobierno.
Según describió, en la última medición de Equipos, el 53% cree que el gobierno va a ser bueno y el 9% considera que va a ser malo. “Esta estructura de juicios casi no ha cambiado en nada desde diciembre”, completó, al señalar que por entonces un 56% creía que iba a ser bueno y un 9% que iba a ser malo.
“Pasó un semestre de gestión y no ha habido cambios todavía ni en el sentido positivo ni en el sentido negativo” en lo que la gente espera del gobierno, sumó.
“El gobierno se encuentra en una fase de apoyo razonablemente buena. La luna de miel no es intensa, no es apasionada, no es del 65% de aprobación como tuvo Lacalle Pou, pero creo que es una luna de miel que evidentemente existió y que, más allá del deterioro reciente, todavía persiste entre los uruguayos”, señaló.
Más adelante, Zuasnabar ratificó que no imagina grandes modificaciones en los apoyos entre la ciudadanía. “El escenario esperable, salvo un acontecimiento disruptivo desde el punto de vista económico o social que acelere ciertos procesos, es que los cambios [de opinión pública] sigan siendo marginales”, sostuvo.