Murió recluso en Punta de Rieles; funcionarios denuncian “inacción y abandono del Estado”

Una persona privada de libertad falleció en la mañana de este lunes en la Unidad nº 6 de la cárcel Punta de Rieles, pocos días después de dos episodios ocurridos en otros centros carcelarios: la muerte de un joven de 20 años y de una mujer de 47. 

“Estos sucesos no son accidentes ni casualidades: son la consecuencia directa de la inacción y el abandono del Estado”, denunció la Organización de Funcionarios Civiles Penitenciarios (Ofucipe) en un comunicado al que accedió Montevideo Portal.

El texto afirma que las cárceles de Uruguay se han convertido en “escenarios de muerte y sufrimiento”, mientras “los discursos oficiales maquillan una realidad que golpea a diario”. “No hay una política penitenciaria seria, integral ni sostenida que trascienda los intereses partidarios”, redacta, y reclama que los funcionarios civiles penitenciarios fueron “dejados de lado en el presupuesto quinquenal”.

“Este presupuesto no reconoce la crisis del sistema penitenciario y vuelve a excluir a los civiles de cualquier mejora sustancial, aunque somos quienes sostenemos día a día el servicio. Las muertes recientes evidencian con crudeza lo que venimos denunciando: la falta de recursos, de compromiso y de políticas serias agrava la emergencia penitenciaria y cobra vidas”, argumenta Ofucipe.

A raíz de la noticia, la organización instaló una carpa frente al Palacio Legislativo, que tendrá actividades a partir del mediodía del martes “como un espacio de resistencia, denuncia, intercambio y articulación política”.

“Llevaremos la discusión a las calles, para que el Parlamento y toda la sociedad escuchen la voz de los trabajadores civiles penitenciarios. Allí se expondrá la realidad del sistema, se presentarán nuestros reclamos y se buscará que las voluntades políticas recapaciten y se reencamine la discusión hacia un presupuesto que atienda de verdad la emergencia penitenciaria”, ratifica el comunicado. “No callaremos ante la indiferencia ni aceptaremos que el sistema penitenciario siga siendo una zona de abandono y muerte”, concluye.