Contenido creado por Martín Otheguy
Locales

La importancia de repasar

El punto clave que "iluminó" la investigación del caso Lola

El fiscal Jorge Vaz explicó a Montevideo Portal por qué al comienzo no se consideraron las declaraciones del Cachila y qué elementos le hicieron volver a ellas.

22.05.2019 11:37

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2019-05-22T11:37:00-03:00
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El pedido de procesamiento del Cachila, el hombre imputado por el homicidio de Lola Chomnalez, abrió varias interrogantes. Por un lado, la abogada del acusado señaló que no hay elementos nuevos en la causa para procesar a su defendido, que ya fue dejado libre en el 2015. Por otro, la divulgación de las declaraciones del hombre, en las que afirma haber visto desvanecerse a la adolescente, llevó a que se cuestionara por qué no se indagó más en su momento al respecto.

La abogada del Cachila, Yesica Biquez, dijo ayer que su imputado hizo estas declaraciones en primera instancia pero luego las negó, y aclaró que la Fiscalía se aferra solamente a estas afirmaciones para pedir el procesamiento.

Sin embargo, la versión del fiscal Jorge Vaz es totalmente distinta. En charla con Montevideo Portal aseguró que el proceso que hizo el imputado en 2015, en sus declaraciones, fue exactamente al revés.

"En 2015 hizo varias declaraciones. Al principio dijo que no tenía nada que ver y luego, siempre en presencia de abogados, aportaba datos nuevos. Iba dando más detalles. Pero después de eso nunca se desdijo", aseguró Vaz, que explicó que se escudó en que no recordaba. "Comenzó diciendo que no sabía nada pero empezó a dar atisbos de que había estado por allí y luego afirmando directamente que sí", contó a Montevideo Portal.

La abogada aseguró que a lo sumo, si estuvo allí, se podría procesar al Cachila por omisión de asistencia, pero no por coautoría del homicidio. Esto, para el fiscal, no tiene lógica debido a sus declaraciones y las pericias científicas. "Él mismo se posiciona allí en el lugar. La pericia indica que Lola no murió naturalmente, la asesinaron y estaba cortada. Él dice que ella se desvaneció y que luego cuando volvió ya no tenía pulso. Eso no es posible. Si volvió, ella debía estar toda lastimada. Incluso si hubiera salido a dar una vuelta y regresara luego, lo que es ilógico, del expediente surge que las heridas fueron hechas antes de que muriera, nadie la cortó o lastimó luego de que el imputado la viera sin pulso", puntualizó el fiscal.

Es decir, surge que él estuvo en el lugar del crimen pero lo que relata es "incoherente y contrario a las pericias al cuerpo". "Nunca puede ser omisión de asistencia en este caso", explicó.

Control zeta

¿Qué decía el Cachila cuando se lo confrontaba con estas incoherencias? Se cerraba, según Vaz, y de una forma poco creíble, tal cual estableció la pericia semiológica. Respondía normalmente a las preguntas banales del comienzo, pero una vez que se adentraban en el hecho "se enojaba, se agarraba la cabeza, decía que no se acordaba de nada, que estaba fisurado y que la Justicia lo quería enterrar". De repente, sin embargo, mencionaba algún hecho preciso sobre el incidente, como la sangre en la mochila de Lola. "Era una memoria selectiva", explicó el fiscal.

Se abre entonces una nueva posibilidad. ¿Podría el Cahcila haber mentido en sus declaraciones iniciales o haber sido "inducido" por la Policía a hacerlas? Esa tesis no se sostiene, apunta el fiscal, porque "lo que él dice no lo puede saber nadie que no haya estado allí".

Como primera prueba, hay un elemento clave que surgió mucho después de estas declaraciones: un informe del forense Guido Berro (uno de los máximos expertos de este campo en el país) que aseguró a los investigadores que la joven había estado arrodillada, algo que describe el propio Cachila en sus declaraciones.

La pericia de Berro analizó los "chorretes" de sangre que la víctima presentaba en sus piernas y estableció, por el recorrido que hacen, que en un momento debió caer de rodillas, como describe el Cachila. "Esta es una, pero son muchas las coincidencias de ese tipo", apuntó el fiscal.

Si estas declaraciones son tan incriminatorias, ¿por qué no hubo conclusiones similares en las investigaciones anteriores? Vaz considera que sus predecesores no tenían todos los elementos que tuvo él. Por ejemplo la pericia de Berro, que fue lo primero que le llamó la atención para "mirar con lupa" las declaraciones de 2015 y que fue aportada mucho después. "Al comienzo, si uno leía sus declaraciones, surgía de las pericias que él estaba mintiendo. Además, al dar el ADN negativo se creyó que era una persona que inventaba o tenía mucha imaginación", opinó. Agregó que en su caso pudo observar los expedientes "ya lejos de los hechos" y tener así otra perspectiva, algo que sus colegas no pudieron hacer. "Eso me permitió atar cabos", apuntó.

La investigación, sin embargo, recién comienza y deberá determinar quién es el autor material del homicidio. El fiscal quiere citar nuevos testigos (que han hablado con el Cachila en este tiempo), otras personas que lo posicionan en Valizas en la época, y otros peritos para reforzar la imputación.