Los tres exdirigentes del Sindicato Único Nacional de la Construcción y Anexos (Sunca) que fueron detenidos este miércoles declararon ante Fiscalía por el caso de los presuntos desvíos de dinero del Fondo Social de Vivienda de Obreros de la Construcción (Fosvoc).

En sus acusaciones, mencionaron al menos a un dirigente del Partido Comunista del Uruguay, uno de los principales sectores del Frente Amplio. 

Acerca de este tema, el senador Óscar Andrade negó que haya habido financiación por parte del Fosvoc y dijo, en diálogo con Las cosas en su sitio (Radio Sarandí), que quienes realizaron el desvío fueron un “puñado de lúmpenes”.

“Les adelanto el resultado de esto: esta causa se va a archivar sin tener ningún vínculo ni con el Sunca ni el Partido Comunista. No van a encontrar ni un peso partido por la mitad que haya ido al Sunca, al PCU o al plebiscito. Porque no hay forma, aparte”, consideró.

Ante estas acusaciones, la senadora nacionalista Graciela Bianchi dijo que “no le sorprenden”. “Antes de que cayera, se recibía plata de la Unión Soviética. Conozco hasta quiénes iban a buscar la plata, que no los voy a nombrar; algunos están muertos y algunos están vivos”, señaló en diálogo con Montevideo Portal.

“¿De dónde creen que sale la financiación? Los que recaudan son los sindicatos. No tiene otra forma de financiación que a través de la recaudación de movimientos sindicales”, agregó.

Bianchi dijo que acusaciones de este tipo son “lamentables” porque “afectan a todo el movimiento sindical”. “No voy a nombrar a nadie porque no tengo derecho, pero si vos ocupás altos cargos dentro del movimiento sindical y sos un jerarca del Partido Comunista, no me digas que no están enterados”, opinó.

A su vez, se mostró partidaria de poder legislar acerca de la transparencia de los sindicatos. “Los legisladores podemos legislar sobre la libertad individual; ¿cómo es que no podemos legislar sobre los sindicatos o sobre las cámaras empresariales? Yo no soy partidaria de la inflación de leyes, pero hay que reglamentar más”, cuestionó.

Por otra parte, el senador blanco Sergio Botana comentó que la acusación es “la más grave” porque “sería robarle el techo a los pobres” y “generaría desconfianza en todo el sindicalismo uruguayo”. “Estamos viendo con expectativa y con mucha preocupación el desarrollo de los acontecimientos”, sentenció.