El rabino Daniel Dolinsky envió un mensaje en recuerdo de los desaparecidos durante la dictadura uruguaya, en el marco del shabat del pasado viernes en la Nueva Congregación Israelita.
Dolinsky inició su intervención al evocar que “probablemente” varios de los presentes hayan estado en el Memorial de la Shoah en la rambla de Montevideo, y apuntó que ese lugar “te devuelve a determinadas circunstancias espirituales y humanas que a veces en la vorágine” cotidiana no se transitan. Así, tras recordar el genocidio, y al referirse a uno de los sobrevivientes de Auschwitz, habló de “el derecho a la identidad y el derecho a la humanidad”.
“En la vida, en las religiones, en los pueblos, para los momentos que queremos recordar generamos días de evocación”, dijo. “En lo judío hemos aprendido que cuando nos concentramos en un día es para que el resto de los días seamos capaces de ponernos en acción. En nuestro querido Uruguay, esta última semana fue el 20 de mayo. Un día para recordar como sociedad. Sin embargo, a veces, por cuestiones vaya a saber de qué, si de lo político, lo corporativo o de cómo nos dividimos como sociedad, nos desprendemos de la idea del recuerdo. Pero en la tradición judía el recuerdo es central”, sumó.
“Por eso, cuando esta semana se nos aparecían carteles preguntando '¿dónde están?', es algo que nos tiene que interpelar a cada uno. Que no es para otros y el problema es que sea para ese día. Tiene que ser para todos los días del año. Y cuando preguntamos '¿dónde están?' no tenemos que pensar en un reclamo legal o político. Tenemos que pensar en una pregunta que nos tiene que atravesar el alma, que interpela una conciencia colectiva para nosotros como uruguayos, como miembros de esta sociedad, y también como judíos. Y que exige respuestas”, agregó.
Dolinsky señaló que las respuestas deben ser “éticas, espirituales y humanas”, volvió a recordar que el pueblo judío vivió el genocidio con “muchas muertes sin nombre” y también dijo que “la memoria es un deber universal”. “Para nosotros el 7 de octubre de 2023 también representa un intento de borrar memoria y borrar identidad. Y también va para ellos la pregunta de: ¿dónde están? Sabemos dónde están, sabemos quién los tiene, quisiéramos que vuelvan a sus casas, pero eso nos tiene que comprometer también en nuestra sociedad a militar por los valores”, apuntó.