El argentino Darío Díaz ganó la última etapa de la Vuelta Ciclista en su edición 68, pero no pudo evitar lo que a partir de la contrarreloj del jueves se presentaba como algo inminente: la consagración del colombiano Iván Casas, del también colombiano equipo Boyacá Orgullo de América.

Tras el recorrido de 96 kilómetros que partió desde San José por Ruta 3, pasando por Ruta 1, accesos de Montevideo, Boulevard Artigas, Agraciada, Paraguay, La Paz, Rambla Portuaria, Ciudadela y 18 de Julio, el pelotón llegó a la línea de meta frente a la Plaza del Entrevero en 18 y Julio Herrera y Obes con un tiempo de una hora, 59 minutos y 48 segundos para el primero.

Casas fue el ganador de la Vuelta, a pesar de no tener mayor destaque en los sprint ni en las clasificaciones de regularidad. De hecho, el competidor del pacífico no se subió al podio en ninguna de las etapas largas, pero supo aprovechar la deserción de la mayoría de los ciclistas el miércoles (VER NOTA) y mantener la ventaja que logró en la única etapa que ganó al día siguiente: la contrarreloj.

Ese triunfo del jueves en Paysandú lo hizo ponerse la malla oro que no largó hasta el final, a pesar de los ataques del catamarqueño Darío Díaz, de Villa Teresa. Incluso cuando pichó el viernes camino a Mercedes, su equipo supo asistirlo y protegerlo para que no perdiera pie. En total, recorrió 1458 kilómetros y 100 metros en un tiempo de 34 horas, 22 minutos y 2 segundos, seguido por Díaz a 26 segundos.

El argentino que finalizó segundo fue, sin dudas, uno de los principales animadores de esta Vuelta Ciclista, ganando las etapas 1, 2, 7, 8, 9 y 10, en Las Piedras, Minas, Trinidad, Mercedes, San José y Montevideo respectivamente. En equipos, el triunfo fue para Porongos.