Minutos después de la victoria de Aguada sobre Trouville por 96-94 en la segunda final de la Liga Uruguaya de básquetbol, Leandro García Morales habló en la transmisión de VTV y se quejó de los “jugadores mala leche” de su rival. El goleador rojiverde fue consultado por una situación puntual en la que el argentino Federico Mariani lo acusó de haberle dejado el pie abajo para lesionarlo, y se defendió atacando.

“Yo no soy mala leche y hay muchos jugadores en la vuelta que lo único que tratan de hacer es pegarme, hace muchos años. Eso que están tratando de hacer, hace 15 años lo hacen. Da la casualidad que lo hacen cuando el partido se da vuelta o cuando vamos 20 abajo. Ahí empieza todo el mundo a gritar y a faltar el respeto”, disparó, y entre los irrespetuosos incluyó a “los dirigentes de Trouville”.

“Entiendo las ganas que tienen de ganar, que peleen todas las situaciones con los árbitros y que alienten a sus jugadores, pero no estoy de acuerdo con que sigan faltando el respeto a los jugadores como lo están haciendo. Y mucho menos jugadores del banco de Trouville que entran a pegar e insinúan que vengo a hacer una jugada mala leche. Hace 23 años juego al básquetbol. Todo el mundo me conoce y sabe que lo único que trato de hacer es jugar al básquet”, concluyó.

Una falta de respeto que salga a hablar así

Al día siguiente hubo respuesta de parte de Germán Fernández, entrenador de Trouville, en diálogo con el programa ‘Puro básquetbol’ de Sport 890. “Durante toda la temporada hemos sido un equipo muy respetuoso de las burbujas, del comportamiento dentro del campeonato y de los rivales. Me parece una falta de respeto al trabajo que hicimos todo el año que salga a hablar así de jugadores de Trouville. Porque además habló puntualmente de jugadores de Trouville que entran desde el banco”, expresó.

“Me parece que esas palabras no son justas con nosotros. Es injusto con jugadores jóvenes que están creciendo. Hay que dejar crecer a la gente joven, a la gente que defiende y a los que dan un paso adelante. Me parece injusto que se hable así de mis jugadores y de mi equipo. Acá no hay mala fe. Lo que hay es un corazón enorme”, sostuvo.

“Él se ha ganado un respeto muy grande y ha sido el jugador más cuidado de la Liga. Me parece que se lo ganó con su trayectoria, por haber ganado mucha cosa, y no tiene necesidad de hablar de nosotros así. Igualmente entiendo que hay una cuestión de pulsaciones, de calentura y de roces de partidos que hacen que a veces hagamos declaraciones que no corresponde”, comentó, aunque cree que García Morales lo que intenta con sus dichos es “cambiar el foco de atención del arbitraje”, que a su entender favoreció a Aguada.

En el próximo partido, cualquier mancha que haya es falta de Trouville

“Mis jugadores juegan al básquetbol. Ahora debemos enfocarnos en lo que debemos hacer y mejorar, porque también se entra en el juego ese de poner en tela de juicio lo que está pasando y al próximo partido cualquier mancha que haya es falta de Trouville porque ‘Trouville va a pegar’. Y eso no puede pasar”, advirtió.

“Ahora parece que nosotros somos agresivos y violentos, cuando en realidad lo que hubo fueron errores humanos que nos perjudicaron. Ojo, perdemos porque erramos tres o cuatro bandejas y 13 libres. Después hubo una falta en un rebote (sobre Leonardo Mainoldi), una pelota en la que Davis pisó afuera y una que habíamos recuperado en gran defensa de Marcos Marotta y terminamos perdiendo el balón (por un pitazo desacertado del árbitro Pablo Sosa). Luego apareció la calidad individual de Aguada, como el triple de Thornton”, analizó.

“Debemos enfocarnos en jugar contra Aguada, no contra García Morales. Él maneja muy bien este tema de la charla y de hacer declaraciones. Nosotros somos un equipo muy joven que no puede entrar en ese tipo de cosas”, agregó Fernández, quien cree que su equipo dio “un paso adelante” respecto a la primera final. “Sentir que éramos competitivos con ellos es un alivio y nos da confianza”, destacó.

“Competimos ante un gran equipo y le hicimos daño como queríamos. Trataremos mañana de plasmarlo de nuevo y de llevar un partido parejo ante un equipo que sufre cuando lo atacan y que no disfruta de defender. Nosotros sí disfrutamos de defender y sabemos que desde ahí podemos lograr cosas, pero erramos muchas situaciones fáciles en el cierre del juego y no resolvimos situaciones de uno contra uno que fueron las claves, sobre todo de Davis y de García Morales”, concluyó.