Rockstar Games volvió a retrasar Grand Theft Auto VI, que ahora tiene como nueva fecha de lanzamiento el 26 de noviembre de 2026. La información fue confirmada en el más reciente informe financiero de Take-Two Interactive, donde la empresa explicó que el cambio busca darle al equipo “tiempo adicional para alcanzar el alto nivel de pulido que los jugadores esperan y merecen”.

En el comunicado, Rockstar pidió disculpas por la nueva demora, señalando que comprende “lo larga que ha sido la espera”, pero que los meses extra permitirán terminar el juego “con la calidad que los fans merecen”. Take-Two agregó que mantiene plena confianza en el estudio: “Rockstar Games lanzará Grand Theft Auto VI el 26 de noviembre de 2026 y seguimos confiados en que ofrecerán una experiencia de entretenimiento sin igual”.

El anuncio tuvo un impacto inmediato en el mercado financiero. Las acciones de Take-Two cayeron cerca de US$ 30 por acción en operaciones posteriores al cierre de la jornada, reflejando la preocupación de los inversores por el segundo retraso del título más esperado de la década.

El CEO de Take-Two, Strauss Zelnick, declaró a IGN que el equipo “ha tenido más tiempo para desarrollar el juego” y que la empresa está “agradecida de que siga dentro del mismo año fiscal”. En otra entrevista con The Game Business, sostuvo: “Cuando fijamos una fecha, creemos en ella. Pero si un juego necesita más tiempo para alcanzar su mejor versión, se lo damos. Y eso es exactamente lo que ocurrió”.

Esta es la segunda postergación pública del título, que originalmente iba a lanzarse a fines de 2025. En mayo de 2025, Rockstar lo había movido al 26 de mayo de 2026. Si el nuevo cronograma se cumple, GTA VI llegará trece años después de GTA V, que debutó en 2013 y se convirtió en uno de los juegos más vendidos de la historia.

La expectativa que rodea al proyecto es enorme. Algunos analistas lo describen como “el lanzamiento más importante en la historia del videojuego”, y estiman que podría superar las 40 millones de copias vendidas en su primer año.

Mientras tanto, el estudio enfrenta polémicas internas, luego de haber despedido a decenas de empleados por “mala conducta grave”. Según la compañía, se trató de filtraciones de información confidencial, aunque un sindicato laboral denunció que los despidos fueron una represalia contra trabajadores que intentaban sindicalizarse.