Dos personas jugaban en Estados Unidos al popular juego en red Call of Duty: WWII, y, según reportan varios medios, discutieron por una apuesta de "uno o dos dólares".

Uno de ellos amenazó al otro con enviarle al SWATT a su casa, una práctica denominada "swatting". Sin embargo, su oponente habría dado un domicilio falso.

Quien amenazó llamó al 9.1.1 y dijo que, en la dirección que tenía de su contendor, podría haber ocurrido un homicidio, e incluso un secuestro, informa el sitio 3Djuegos.

Cuando el SWAT llegó al lugar y el dueño de casa abrió la puerta, un agente abrió fuego por entender que el hombre había realizado un movimiento peligroso.

El hecho ocurrió en Wichita, Kansas, aunque los responsables directos de la muerte se domicilian en Los Angeles, California, señala el portal de La Vanguardia.

El fallecido no era un "gamer", y no tendría nada que ver con la disputa.

No es la primera vez que quien envió a las fuerzas especiales hacía algo similar: ya había amenazado antes a varios miembros de la comunidad, y podría ser el responsable de una amenaza de bomba durante la Call of Duty World League, desarrollada en 2017 en Nueva Orleans.