"Nunca escondí mi pasión por el Carnaval y la visión clara que tengo de la importancia económica de esa manifestación cultural para nuestra ciudad, pero no tiene ningún sentido a estas alturas imaginar que tendremos condiciones de realizar el carnaval en julio", anunció en Twitter.

El alcalde recordó que la fiesta, especialmente los desfiles en el Sambódromo, exigen una gran preparación por parte de los órganos públicos y de las escuelas e instituciones ligadas a la samba, algo "imposible" de hacer en estos momentos, por lo que no habrá Carnaval en 2021.

En noviembre, la liga de las escuelas de samba de la ciudad propuso celebrar el Carnaval en julio si había avances decisivos en la vacunación que permitieran celebrar la fiesta con seguridad, pero ante el empeoramiento de la evolución de la pandemia esa alternativa también fue descartada.

El alcalde, que es un claro defensor de la fiesta, acompañó su anunció en las redes sociales de fotografías de desfiles de años anteriores en los que desfiló en el Sambódromo como un componente más, y quiso lanzar un mensaje de optimismo.

"Estoy seguro de que en 2022 podremos (todos debidamente vacunados) celebrar la vida y nuestra cultura con toda la intensidad que merecemos", prometió.

También aseguró que el ayuntamiento ya está elaborando convocatorias de ayudas para que los miles de trabajadores que realizan la fiesta "tengan alguna forma de sustento a lo largo de 2021".

En Río de Janeiro, el Carnaval es una industria cultural que genera un fuerte impacto económico en la ciudad y de la que dependen miles de familias, no sólo del sector turístico.

(Sputnik)