El hecho ocurrió en las afueras de la localidad de Ringwood, en Nueva Jersey, cuando un patrullero de la Policía local se topó con una gran rama obstruyendo la carretera.

Tal como se aprecia en las imágenes, uno de los ocupantes del móvil desciende del vehículo e intenta apartar el obstáculo.

Mientras maniobra para despejar la calzada, un árbol entero se viene abajo y de milagro no aplasta al uniformado.