Bobby recorrió tres kilómetros tras el coche fúnebre de su dueña para poder despedirse de ella junto a sus familiares y amigos. El hecho ocurrió semanas atrás en Malasia, y el registro en video se ha ido viralizando por el mundo.

Tal como se aprecia en el video, el animal sigue en todo momento el cortejo de coches desde el borde de la carretera. Los deudos de la difunta no se percataron de ellos, y al llegar al cementerio y bajar de los coches se llevaron una sorpresa.

Tras el entierro, Bobby se echó junto a la tumba de su ama, y se negó a abandonar el lugar. Finalmente, uno de los nietos de su dueña decidió quedárselo y se lo llevó a su casa.