Megan Fox inició un tratamiento láser para "borrar" su característico tatuaje de Marilyn.

"Me lo estoy quitando. Es un personaje negativo, que sufría de desórdenes de personalidad y era bipolar", comentó la joven durante el rodaje de la película "This is 40".

La actriz agregó que desea evitar "atraer energías negativas", por lo cual decidió someterse al costoso y prolongado tratamiento que terminará con el dibujo estampado años atrás en su antebrazo.