El registro corresponde a un sorteo de la liga de fútbol de Luxemburgo. No se trata de un torneo que concite la atención de la prensa internacional, y ahora ha trascendido fronteras por cuestiones extradeportivas.

Numerosos internautas han llamado la atención sobre la conducta del individuo que ocupa el lugar centra en el sorteo. Con absoluto descaro, el hombre toma bolillas, las examina y las devuelve, hasta dar con la que está buscando.

Puede sonar exagerado, pero las imágenes no dejan lugar a dudas.