Uruguay reduce muertes maternas en 2024 y lidera cifras en la región

En el marco del Día Internacional de la Obstetricia, que se celebra este domingo 31 de agosto, el Ministerio de Salud Pública (MSP) de Uruguay difundió datos alentadores: la tasa de mortalidad materna en el país descendió a 10 muertes por cada 100.000 nacidos vivos, tras registrarse tres fallecimientos entre 29.899 nacimientos. La cifra representa una mejora respecto a 2023, cuando se reportaron seis muertes en 31.385 nacimientos.

La reducción consolida a Uruguay como uno de los países con mejores indicadores de salud materna en América Latina, una región históricamente marcada por desigualdades en el acceso a la atención obstétrica.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoce a los obstetras como actores clave en la reducción sostenida de la mortalidad materna y neonatal. En este contexto, la presidenta de la Sociedad Ginecotocológica del Uruguay, Natalia Pérez, subrayó que el éxito nacional se debe a una sólida política de control del embarazo y seguimiento integral de la salud de la madre y el recién nacido.

“Por suerte, somos un país que tiene mínima muerte materna gracias al control del embarazo”, afirmó Pérez, quien también integra el Sindicato Anestésico Quirúrgico.

La OMS define la muerte materna como el fallecimiento de una mujer durante el embarazo, el parto o hasta 42 días después de su finalización, por causas relacionadas con el embarazo o su tratamiento, excluyendo factores accidentales. La atención obstétrica, según Pérez, no se limita a lo médico, sino que incluye apoyo emocional y social en una etapa crucial de la vida de las mujeres.