En el marco de las Conferencias de Invierno de Oncología 2025, el médico Álvaro Ronco presentó los resultados de un estudio sobre los beneficios de consumir té y mate para la prevención de cánceres de mama y colon.
El evento contó con la presencia de Gonzalo Moratorio, virólogo que terminó recientemente su tratamiento en el hospital Sirio-Libanés tras ser diagnosticado e intervenido quirúrgicamente por un tumor cerebral.
En primer lugar, el investigador llegó a la conclusión, a través de modelos estadísticos complejos llamados “regresiones”, de que las mujeres uruguayas que no toman mate tienen una probabilidad levemente mayor de desarrollar cáncer de mama que aquellas que sí lo consumen.
“Lo que se observa es que, incluso un consumo bajo de mate ya representa una reducción importante en el riesgo, y que, a mayor consumo (más de un litro diario), la diferencia protectora se hace aún más notoria”, señala el informe.
Según el estudio, “algo similar” al mate ocurre con el té negro, ya que una taza diaria o más se “asocia con menor riesgo de cáncer de mama”.
“Cuando se analizan en conjunto ambas infusiones, el efecto protector se multiplica: las mujeres que consumen ambos diariamente presentan un riesgo hasta seis veces menor de cáncer de mama en comparación con las que no los consumen”, añade.
El segundo informe, sobre el cáncer colorrectal, consideró a 3.000 pacientes, de los cuales 600 tenían cáncer colorrectal y 2.400 no. En los hombres, no se vio una diferencia significativa por el consumo de mate, pero en las mujeres sí, además de aumentar con la edad.
“En el caso del té, la protección es más pareja y sostenida a lo largo del tiempo; aun con poco consumo ya se registran efectos positivos. Con el café, en cambio, el impacto fue moderado: un efecto protector en hombres, pero prácticamente nulo en mujeres”, señala.
Ronco explica estos resultados en que el mate contiene dimetilantraceno y benzopirenos, sustancias que son potencialmente cancerígenas pero que se encuentran en estado inactivo, por lo que solo se vuelven dañinas si el cuerpo no tiene suficientes antioxidantes.
Para evitar eso, se recomienda una alimentación rica en frutas, verduras y aceites saludables, ya que aportan antioxidantes que neutralizan esas sustancias. “Por eso, el mate puede ser protector cuando se combina con una dieta adecuada, pero puede resultar dañino en personas con una dieta pobre en antioxidantes”, sostiene el informe.
“En paralelo, el mate contiene compuestos bioactivos beneficiosos, como polifenoles y ácido oleico e hidroxitirosol (presentes también en el aceite de oliva), que han demostrado ser antimutagénicos y ayudar a prevenir procesos cancerígenos”, finaliza.