Los humoristas Dady Brieva, Miguel del Sel y Darío "Chino" Volpato, integrantes de Los Midachi, visitaron la mesa de Podemos Hablar, un programa de Telefe. En determinado momento del programa, del Sel, militante del PRO, sector político del presidente Mauricio Macri, fue consultado sobre la situación que atraviesa Argentina, y su respuesta provocó la reacción de Brieva.

"Yo estoy preocupado, por supuesto que tengo mi pensamiento y voy a seguir brindando apoyo al gobierno porque pertenezco a este espacio y deseo que no se cometan errores, deseo que nos vaya bien y que el país salga adelante de una vez por todas", inició del Sel.

"Creo que el gobierno no supo contar en qué situación había quedado Argentina con el gobierno anterior. Hay muchas cosas para analizar, desde todo lo que ha pasado con las denuncias, todas las muestras de corrupción que hubo, de que han hecho un desastre, más allá de que creo que también hubo errores en este gobierno, que no se habló con la verdad, que Mauricio tendría que haber contado todo el despelote que había quedado cuando asumió", continuó.

"Yo considero que es un país que está devastado, porque hay una sociedad que se cayó a pedazos, porque no hay valores. El país sigue funcionando porque hay un sector de la sociedad que todavía trabaja y estudia, es responsable y es honesta, pero hay un gran sector de esta Argentina que se cayó a pedazos, que no ayuda, y que nos va a costar muchísimos años recuperar", concluyó el humorista.

A continuación, al ser consultado por el conductor, Brieva se mostró molesto con su compañero: "Ya lo viví este momento, dijimos que no íbamos a hablar más y volvimos a hablar".

"Nosotros venimos a la televisión para vender entradas. Vos no tenés que hablar de tu equipo (en referencia a la participación de del Sel en el partido de Macri)", continuó.

Sin embargo, finalmente decidió dar su opinión sobre la situación: "Pienso que tuvieron tres años para decir lo que tenían que decir. Prometieron un montón de cosas que no cumplieron. Pienso que están mintiendo, son unos grandes cínicos".

"Quiero que se queden hasta el final para que la gente nunca vas vuelva a votarlos. No quiero que se vayan, quiero que se queden, como esos jugadores que juegan mal y que putean al árbitro, y el árbitro dice "no, quedate hasta el final, hijo de puta, así la gente se da cuenta de que jugás mal". Quiero que se queden hasta el final y la pasemos mal para que no compremos más espejitos de colores", agregó.