Esta semana, dos noticias que conjugan lo político y lo judicial ocuparon titulares en la prensa local.

La primera ocurrió en Argentina, donde, al cabo de más de una década de devenir judicial, se produjo la condena inapelable de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, en el marco de la denominada causa Vialidad.

De acuerdo con el dictamen de la Suprema Corte del país vecino, Fernández deberá cumplir seis años de prisión en régimen domiciliario, y quedará imposibilitada de forma permanente para el ejercicio de cargos públicos.

El fallo generó rechazo en filas opositoras, que cuestionaron la imparcialidad de los jueces y condenaron la medida como una forma de proscripción.

Mientras tanto, en este lado del Plata, el exsenador frenteamplista Charles Carrera fue imputado por fraude, utilización indebida de información privilegiada y falsificación ideológica en documento público.

Previamente, el Frente Amplio pidió a la comisión de Asuntos Administrativos, que preside Pedro Bordaberry, que la fiscal de Corte, Mónica Ferrero, fuera citada de forma “urgente” por “manejo extraño” en la Fiscalía General de la Nación. Entre los casos que motivaron el pedido de citación se encuentra el manejo del caso Carrera.

En la red social X, Ignacio Álvarez trazó un paralelismo entre ambos casos, e hizo su propia apuesta: adelantó que, al igual que Cristina Fernández, Carrera también terminará condenada.

“Hace años, siendo gobierno, Cristina iba prendida en las obras que los K le encargaban a dedo a su amigo y cómplice Lázaro Báez. Y también hace años, siendo gobierno Charles Carrera, hizo pasar por policía para atenderlo ilegalmente en el Hospital Policial a un civil que quedó en silla de ruedas a raíz de un balazo proveniente de la casa del subcomisario donde se hacía una fiestita con putas y narcos. Todo comprobado, y ambos terminarán condenados”, contextualizó.

“Pero esta semana, tanto el FA como el peronismo se victimizan y hablan de proscripciones en base a una justicia comprada. O sea: la confirmación de su hipócrita inmoralidad que traiciona los principios que dicen defender, cagándose en el pueblo”, opinó.

Horas antes, Álvarez ya había planteado otro símil “jurídico rioplatense”.

“La condena a la cínica y corrupta de Cristina demuestra la importancia de una Justicia independiente, el único sistema que en Uruguay la izquierda aún no ha podido colonizar completamente. De ahí las operaciones del FA para derribar a la Fiscal de Corte, Mónica Ferrero: el último bastión de las garantías individuales y contra la corrupción pública. A estar atentos”, escribió.