La fiscalía de Fráncfort señaló en un comunicado que "acusaba de complicidad de asesinato a un antiguo vigilante (del campo de exterminio) de Lublin-Majdanek" a un ciudadano de Fráncfort, cuya identidad no fue revelada.

Un tribunal de esta ciudad tiene sin embargo que validar estas acusaciones antes de que se abra un posible proceso. Entre otros temas, la corte tendrá que decidir si el nonagenario está capacitado para comparecer.

Este hombre es sospechoso de, entre agosto de 1943 y enero de 1944, cuando tenía entonces 22 años, haber trabajado como guardián del campo de exterminio de Majdanek.

El 3 de noviembre de 1943, habría "apoyado" una operación llamada "Fiesta de la Cosecha", dirigida por las SS durante la cual "al menos 17.000 prisioneros judíos fueron abatidos en las fosas creadas con ese objetivo".

Su actividad de vigilancia es una "contribución" a esta matanza de la que tenía "total conocimiento" y que "favoreció de forma voluntaria", insiste la fiscalía de Fráncfort, que se basa en elementos de la oficina alemana de investigación de los crímenes del nazismo.

"Tenía que saber que la gente era asesinada (en Majdanek) por motivos racistas y de desprecio humano", estima la fiscalía.

El régimen nazi construyó el campo de Majdanek en 1941 en la Polonia ocupada cerca de Lublin y estuvo en funcionamiento hasta 1944.

Según las estimaciones del museo del campo, 80.000 prisioneros, de ellos 60.000 judíos, fueron ejecutados, asesinados en cámaras de gas o murieron de hambre, enfermedad o por agotamiento en el trabajo.

En total, 150.000 personas estuvieron encarceladas en Lublin-Majdanek.

AFP