Contenido creado por Marina Santini
Policiales

Retorcidos

Prisión para la pareja que engañó, robó y mató a Federico Olivera

El fiscal solicitó prisión preventiva para la imputada por 180 días; el imputado está cumpliendo pena por el asesinato de dos taximetristas.

08.02.2019 20:14

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2019-02-08T20:14:00-03:00
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La Fiscalía Penal de Montevideo de Homicidios de 1º turno, a cargo del fiscal Juan Gómez, imputó a un hombre (M.N.N.T.) y una mujer (L.C.C.D.) por un delito de homicidio muy especialmente agravado, en calidad de autores, por el crimen de Federico Olivera, asesinado el pasado 9 de abril.

Gómez solicitó, como medida cautelar, la prisión preventiva de la imputada, menor de edad, por el término de 180 días, mientras se continúa investigando de cara al juicio oral. El imputado ya está cumpliendo prisión por el asesinato de dos taximetristas.

Según Fiscalía, los imputados en esta causa "urdieron y ejecutaron un plan, con la finalidad de atraer a la víctima hacia un lugar descampado y que conocían perfectamente, para apoderarse de sus pertenencias y obtener un provecho económico, y darle finalmente muerte ya que los había reconocido, y de esa manera asegurarse el resultado del primigenio ilícito y procurarse la impunidad".

A la imputada se le computarán atenuantes por minoría de edad, confesión y primariedad absoluta. Por el contrario, al imputado se le computarán agravantes por reincidencia, ya que tiene una causa por violencia privada con sentencia de 2016.

Crónica de un encuentro fatídico

Según consta en el pedido de formalización, los imputados, quienes son concubinos desde tiempo atrás, acordaron convocar a la víctima, Federico Olivera, a fin de apoderarse de su moto, celular y tarjeta de cobro, el 9 de abril de 2018.

Las conversaciones de la imputada (C.) y la víctima se realizaron en un principio desde el
celular del imputado N.T., que era compañero de trabajo de Federico.

La imputada lo citó para tener un "encuentro personal" en la noche del 9 de abril en un lugar próximo a sus domicilios, en el barrio Piedras Blancas. Según el documento, también mantenían conversaciones a través de Facebook.

Federico se trasladó al sitio de encuentro en su moto, lo cual fue registrado por cámaras de AVARU, perdiéndose su rastro en General Flores y Guerra, cuando iba en dirección a avenida Belloni. Esa fue la última vez que se lo vio por parte de las cámaras y de su entorno.

La imputada C., le dijo a la víctima que se detuviera frente a un supermercado por Teniente Galeano esquina Belloni, que ella iría a su encuentro. Finalmente se encontraron, cerca de las 21 horas.

El imputado N.T. también esperaba en el lugar, "al lado del basurero". Federico y C. caminaron juntos, conversaron y se dirigieron hacia el basurero, con la excusa de la mujer de que tenía ganas de orinar.

Allí, Olivera fue sorprendido desde atrás, por N.T. (que aún no se sabe si estaba sólo o con alguien más); este lo tiró al suelo, lo ató con cuerdas y le colocó una cinta en su boca.

El imputado ocultaba su rostro detrás de un pasamontaña, pero al sustraer la tarjeta de cobro de haberes de Federico, le exigió la clave personal, a lo que este lo reconoció por su voz. Entonces, N.T. lo mató, asfixiándolo con una bolsa.

Mientras tanto, la imputada C. se dirigió con el teléfono celular y la moto de la víctima hasta el domicilio que ocupaban con N.T.; éste, luego de dar muerte a Federico, lo despojó de sus ropas, quemándolas y dejó el cuerpo debajo de un colchón de Polyfon entre la maleza.

Días después, con la ayuda de M.R., quien ya fue formalizado, enterraron el cuerpo en la zona donde fueron hallados parte de los restos.

N.T. y C., en seguida de ocurrido el homicidio, ofrecieron la moto al ya formalizado M.A.B., por la suma de $500, quien no la aceptó, pero sí adquirió el celular por la suma de $500 en droga y $300 en dinero efectivo.



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