El Monitor Educativo, un instrumento de medición que desde hace 20 años informa sobre indicadores de la educación pública en el país, indicó que en 2021 “aumentó la brecha” entre los niveles socioeducativos de los alumnos. Según el documento primario, al que accedió el Semanario Búsqueda y publicó este jueves, el incremento de la inequidad se explica por la covid-19 y la decisión de cierre de instituciones educativas para evitar y reducir contagios.

El documento señala que las diferencias entre los sectores socioeconómicos se leen a través de las cifras de asistencia y repetición, dos elementos que comprometen a los niños de los niveles formativos más bajos y de las franjas sociales más pobres. Asimismo, el medio anteriormente mencionado destaca que tanto fuentes oficiales como opositoras coincidieron en que los resultados están “bastante alineados” con lo que estaba previsto sobre este estudio, que abarcó 339.472 estudiantes de la Dirección General de Educación Inicial y Primaria.

De la cifra total de alumnos anteriormente mencionada, unos 88.937 estudiantes corresponden al nivel inicial, 244.811 asisten a escuelas comunes y 5.724 reciben formación especial. Acorde a lo que plantea el documento, la matrícula total disminuyó en 2021 respecto a los últimos tres años, que venía ascendiendo, que se explica con la caída de los nacimientos registrados desde 2016 y un decrecimiento de la inscripción de educación inicial en 2021.

Los indicadores que mostraron las brechas e inequidades entre los sectores más ricos y los más pobres son los que “preocupan” más, que se refleja en la asistencia del alumnado y la repetición, ambos datos que muestran una “diferencia sensible” entre los diferentes niveles. Con respecto a las asistencias, el trabajo señala que “varió mucho mes a mes” conforme al calendario de reapertura y obligatoriedad de asistencia, además del momento del año y la exposición a las clases presenciales.

Asistencia

En concreto, la tasa de asistencia se situó en 2021 en 72,6%, un descenso mayor al de 2019 (86% en año prepandemia), pero también con respecto a 2020 (76% en plena pandemia). La educación en Primaria tuvo asistencia más elevada que en inicial y en educación especial, al tiempo que el porcentaje más alto de inasistencia fue en las escuelas Aprender, cuyo contexto es crítico.

Si se cuentan los últimos años, la tasa de asistencia cayó 14% entre 2017 y 2021, y 20% en los contextos críticos, considerando el porcentaje de concurrencia en días lectivos con escuelas abiertas. “El dato da cuenta de la disposición de los niños a asistir a clase, que entre 2020 y 2021 volvió a bajar 3,3%.

Según el documento al que accedió Búsqueda, los niños más afectados son los que concurren a las escuelas Aprender, que son los más pequeños y los que están en el nivel socioeducativo más bajo. Asimismo, se hace especial énfasis en los que corresponde ir a clase en Montevideo y el Área Metropolitana.

Repetición

De primero a sexto de escuela primaria, la repetición se ubicó en 4,4%, mejorando respecto a 2020, pero todavía sin alcanzar los niveles prepandemia. El semanario consigna que la tendencia histórica de la repetición, que venía siendo medida desde el año 2000, era de descenso, sin embargo, en los dos últimos años este indicador se frenó como “efecto directo” de la covid-19. Al igual que las asistencias, el problema mayor está en las escuelas Aprender de Montevideo, donde se duplica a las cifras del interior, y se enfatiza aún más en los varones y en los grados escolares más bajos.

Finalmente, otro dato preocupante: en 2021 la repetición cayó en los quintiles 2 a 5, pero no lo hizo en el quintil 1, que está asociado a los sectores más vulnerables de la sociedad y los más pobres; este indicador se repite por segundo año consecutivo. A su vez, se agrandó la brecha entre los niveles más ricos y los más pobres dado que el quintil 5 tuvo una diferencia de 5,3% menos de repeticiones que en el quintil 5, un elemento que venía acortándose desde el 2003.