Divididos en tres grupos de 60 personas, los 180 consumidores que se anotaron hace casi un mes en AECU para formar un club social de cannabis se preparan comenzar a cultivar en julio próximo de manera no clandestina.

Uno de los grupos ya comenzó a discutir la operativa de la plantación, que será en un local cerrado, pero todavía no se definieron detalles técnicos, explicó a Montevideo Portal Juan Vaz, de AECU. Por ejemplo, el grupo debe determinar se tratará de un cultivo en tierra o será hidropónico, o si la luz artificial será de lámparas de sodio o de tubos led, lo que incide en los costos y en la producción.

Otro grupo empezará la semana que viene a discutir el mismo tipo de decisiones -conseguir local y definir operativa- y el tercero lo hará en los días siguientes.

Para tener al frente de esas producciones "gente profesional y responsable", Vaz indicó que prevén enviar a algunos integrantes a realizar cursos de capacitación en el exterior. "Puede ser en Holanda, en España o en Estados Unidos, en California", ejemplificó.

AECU tiene una posición clara sobre la legalidad de su iniciativa: El consumo no está penado, la producción destinada al narcotráfico sí, pero no la que asegure al consumidor tener cantidades razonables de marihuana. Si un juez procesa a alguien por autocultivo, "la única vía que deja para el consumo, que no está penado, es recurrir al traficante", afirmó Vaz en abril pasado, cuando se anunció la conformación del club. Por tanto, ese juez sería "cómplice" de los narcotraficantes.

Estos autocultivos serán de conocimiento de las autoridades, que sabrán dónde se realizan y se les pedirá que controlen y auditen la producción.

En tanto, el oficialismo se apresta a tratar de aprobar en junio en la Cámara de Diputados la ley de la marihuana con cambios al último proyecto redactado. No habrá ni producción ni venta estatal, sino que se regulará el mercado mediante el otorgamiento de licencias y la creación de un instituto. El diputado Darío Pérez puso condiciones para apoyar el proyecto y asegurar los 50 votos que necesita. Luego el texto deberá ser sancionado por el Senado.