"Si eligen la muerte los problemas están en cierto modo resueltos; pero ¡cuánta amargura hay detrás de este razonamiento, y qué rechazo de la esperanza implica elegir renunciar a todo y romper todos los lazos!", agregó.

El papa y el Vaticano habían tomado posición en el caso del francés Vincent Lambert, de 42 años y quien murió el 11 de julio tras la suspensión del tratamiento que lo mantenía vivo, al cabo de una batalla judicial que lo convirtió en un símbolo del debate en Francia por la muerte digna.

Francisco, quien había señalado en ese entonces que "cada vida tiene valor, siempre", pidió este lunes a los médicos no seguir "las vías más radicales".

AFP