En Londres, una exclusiva mezcla gourmet que incluye café de heces felinas se vende en un centro comercial por US$100 la taza.

Aclaremos: está compuesto por granos carísimos y no accesibles a la mayoría del público, como el Jamaican Blue Mountain y el Kopi Luwak. Sin embargo, lo que no es de público conocimiento es que dichos granos, según reporta la cadena británica de la BBC, son excretados por los llamados gatos de Algalia.

En Londres, los granos excretados por estos felinos llegan a valer US$648 el kilo. Los gatos mencionados viven al sur de Asia y se alimentan, gracias a su instinto, exclusivamente con los mejores granos de café.

La pulpa del grano se abre antes de ser desechada, informa la BBC, y los excrementos son luego recogidos por los trabajadores de la plantación, encargados de limpiar la suciedad y quedarse con lo bueno.

David Cooper, el creador, afirma que los granos "son tostados a mano lentamente, durante aproximadamente 12 minutos, para obtener el máximo potencial" . El resultado, aunque haya salido originariamente de las deyecciones de gato, vale 100 dólares.