La Cámara de Diputados vota en la jornada de este miércoles el proyecto de ley de salvataje de la Caja de Jubilaciones y Pensiones de Profesionales Universitarios, organismo que atraviesa una profunda crisis financiera e informó que va camino a quedarse sin dinero para afrontar sus obligaciones en julio.
La iniciativa, que fue presentada por el Poder Ejecutivo, se aprobó este lunes en la comisión especial creada para discutir el asunto, pero aún quedan ciertos puntos de no acuerdo entre el Frente Amplio y los partidos de la oposición.
En principio, el proyecto se aprobará en general con los votos frenteamplistas, nacionalistas, colorados y del Partido Independiente, pero resta saber cómo va a ser el articulado con el que llegará a discutirse en la Cámara de Senadores. La principal diferencia entre ambos bloques radica en la forma en la que está diseñado el financiamiento.
El oficialismo armó un esquema para que la caja recaude US$ 164 millones anuales. De ese dinero, un 40% se basa en el aporte de los afiliados activos, un 27% en el de los pasivos y el restante 33% en “aportes de la sociedad”, principalmente mediante Rentas Generales.
El Frente Amplio plantea una suba de 18,5% a 22,5% en el porcentaje de aportes de los afiliados activos —que permitiría recaudar US$ 33 millones por año— y que puede volver a disminuir en caso de que la caja logre estabilidad, una “prestación de carácter pecuniario” de jubilados y pensionistas que gravará sus asignaciones de acuerdo a una escala y que permitirá embolsar US$ 44 millones por año y US$ 36 millones anuales que saldrán de las arcas estatales.
Por otra parte, la oposición diseñó un esquema con el fin de recaudar US$ 136 millones que deja en 18,5% la tasa de aporte de los activos, que no prevé un gravamen a los pasivos pero sí estima una ayuda estatal mayor que la del oficialismo. Blancos, colorados e independientes plantean que la asistencia del Estado sea en base a lo que se recauda de IASS, que equivale a US$ 39 millones anuales.
La emisión de títulos de deuda por parte de la caja o préstamos con garantía del Estado permitiría recaudar US$ 50 millones al año más y también se prevé que el ajuste de los timbres profesionales por Índice Medio de Salarios, aspecto incluido por pedido de la oposición, permita cobrar entre US$ 15 millones y US$ 18 millones, según las estimaciones de ambos bloques.
En principio, Diputados aprobará el proyecto general sin los votos de los dos diputados de Cabildo Abierto y sin los dos de Identidad Soberana.
¿Qué puede suceder en la Cámara de Senadores?
Al tener el Frente Amplio mayoría absoluta en la Cámara alta, no parecería haber mayores inconvenientes para que se apruebe. En caso de que surjan cambios en la conformación final, deberá volver a votarse la aprobación o rechazo del total del proyecto en Diputados.
Si la Cámara baja rechaza el proyecto enviado por el Senado, este será puesto a consideración de la Asamblea General, en donde se deberá acordar entre ambos bloques para llegar a dos tercios de la conformación total para poder tomar cualquiera de los dos caminos.
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