Un donante de esperma en Países Bajos, vinculado con más
de 550 hijos engendrados por donación de semen en al menos 13 clínicas
neerlandesas y extranjeras, será llevado ante los tribunales por una de las
madres inseminadas y por la fundación Donorkind, que defiende los intereses de
las personas nacidas por este método.
La propia fundación anunció que iniciará un procedimiento judicial para
intentar detener el comportamiento de este donante neerlandés de 41 años,
acusado de engañar a mujeres en todo el mundo, al haber mentido y minimizado el
número de veces que había donado su esperma, puesto que Donorkind contabiliza
que ha ayudado a engendrar más de 500 niños.
El donante ha entregado su esperma en al menos 13 clínicas en Países Bajos y en
el extranjero, y “también se acerca a futuros padres que buscan un donante para
su inseminación en casa a través de plataformas de reuniones y redes sociales,
y miente sobre el número de hijos que ha tenido”, señala la fundación.
Las pautas de las clínicas exigen a un donante de esperma hacerlo un máximo de
25 veces con éxito o ayudar a 12 familias en total, para evitar la endogamia,
el incesto y los problemas psicológicos de las personas nacidas por este
método.
“Ahora que este hombre ha indicado a las madres que no quiere detener su
comportamiento y recientemente se ha acercado a nuevos futuros padres, se pide
prohibirle bajo sanción nuevas donaciones, que se le exija que no contacte con
nuevos futuros padres, y que escriba a las clínicas para pedir la destrucción
de su esperma almacenado”, advierte Donorkind.
Eva, la madre que inicia ahora la denuncia en los tribunales contra este
sujeto, asegura que él se había comprometido a no engendrar más de 25 hijos,
cuando ella lo eligió como su donante en 2018.
“Si hubiera sabido que ya había tenido más de 100 hijos, nunca le hubiera
elegido. Cuando pienso en las consecuencias que esto podría tener para mi hijo,
me quedo con mal cuerpo y me entra la incertidumbre sobre su futuro: ¿cuántos
hijos más habrá? En conversaciones con el donante, muchas madres le han pedido
que parara, pero nada ayuda”, dice Eva.
Su abogado, Mark de Hek, alerta que el donante está actuando ilegalmente “al
anteponer su impulso reproductivo” y recuerda que “este comportamiento es
peligroso para el bienestar mental y la salud de los niños nacidos por donación”.
La asociación de ginecólogos neerlandeses advirtió por primera vez en 2017
sobre este hombre, un músico, cuando se supo que había engendrado al menos 102
niños en Países Bajos a través de 10 clínicas diferentes.
El donante fue incluido en una lista negra en las clínicas neerlandesas, pero
continuó donando en otros países, como Dinamarca y Ucrania.
No está claro cuándo se verá el caso en la Justicia neerlandesa, pero Donorkind
espera tener más detalles “en las próximas semanas”.
Además de este caso, la fundación identificó ya al menos 10 ginecólogos
neerlandeses que han usado su propio semen sin conocimiento de las mujeres que
querían quedarse embarazadas en clínicas de fertilidad de Países Bajos.
Al mismo tiempo, una cifra récord de 1.415 personas nacidas por donación de
esperma buscaron en 2021 información genética sobre su padre biológico, tras
hacerse públicos estos escándalos.
EFE