Los principales dirigentes del Partido Nacional reaccionaron ante el cese del jefe de Policía de Río Negro, Sergio Solé, tras los dichos que el funcionario envió a una radio local, en medio de una polémica con los blancos tras haber visitado la Mesa Política departamental del Frente Amplio.

El presidente del Directorio nacionalista, Álvaro Delgado, valoró “la correcta decisión” del ministro del Interior, Carlos Negro. “No se puede permitir la partidización de la Policía Nacional”, apuntó.

Por su parte, el senador Javier García, líder de Alianza País, alertó que “no se puede agraviar y mentir gratuitamente” y que, si bien hay que cumplir con la Constitución y la ley, además se debe “respetar”. Y agregó: “Es hora de que el gobierno empiece a poner orden”.

El senador Sebastián da Silva, del Espacio 40, fue otro de los que reaccionó. “A comer torta fritas en el comité”, lanzó.

Esta semana, mientras el diputado nacionalista Pablo Abdala estaba en una entrevista para Impacto FM de Fray Bentos, Solé envió un mensaje que se leyó al aire. Allí señaló que “algunos blancos entienden que no [violó] ninguna norma, pero parece que [faltó] a la ética”. Así, cuestionó si se trata de la misma vara ética con la que “midieron a los que mintieron en el Parlamento, entraron por el garaje de la Torre Ejecutiva, los que rompieron documentos en el piso 11”, todos episodios vinculados con el caso del narcotraficante Sebastián Marset durante el período pasado. También hizo alusión a “los que se robaron la mitad de Artigas” o “los que se metieron 30 ediles en Salto Grande”.