EEUU: enfermero muestra “en carne propia” los efectos del COVID-19

Un enfermero estadounidense compartió una impactante foto del impacto que el COVID-19 tuvo en su cuerpo.

"Quería demostrar que esto puede sucederle a cualquiera. No importa si eres joven o viejo, si tienes enfermedades asociadas o no. Esto puede afectarte", escribió Mike Schultz en Instagram.

En su cama de la sección para enfermos por coronavirus en el Hospital de Boston, Mike Schultz se dio cuenta en una conversación con una enfermera de los efectos de haber sido sedado e intubado. "Creí que llevaba una semana internado, y ya habían pasado seis" dijo en declaraciones a BuzzFeed News.

"Estaba demasiado débil. Esa fue una de las partes más frustrantes", recordó. "No podía sostener mi teléfono, me resultaba demasiado pesado. No lograba escribir, porque me temblaban mucho las manos", agregó.

Schultz, de 43 años y oriundo de San Francisco, no tenía problemas de salud previos, hacía deporte de seis a siete veces por semana y pesaba alrededor de 86 kilos. Al momento de recibir el alta, pesaba solo 63,5. Ahora, su capacidad pulmonar está volviendo lentamente a la normalidad.

Días atrás, Schultz hizo una publicación en Instagram donde mostraba un "antes y después" de la enfermedad. La foto de la izquierda fue tomada aproximadamente un mes antes de que se le diagnosticara COVID-19. La de la derecha fue tomada en la sala del hospital, luego de superar los peores momentos de la dolencia. Según contó, el sólo hecho de levantarse de la cama lo dejó exhausto.

"No pensé que el coronavirus fuera tan grave hasta que las cosas comenzaron a suceder. Pensé que era lo suficientemente joven como para no verme afectado, y sé que mucha gente piensa eso", dijo.

Schultz fue al hospital el 16 de marzo. Dos días antes, había viajado desde su casa en Boston a San Francisco con la intención de ver a su novio, el DJ Josh Hebblethwaite, de 29 años. Estaba un poco enfermo, pero no tenía fiebre.

La semana anterior, los dos habían ido a Miami Beach para el Winter Party Festival, una fiesta en la que Hebblethwaite estaba trabajando y que atrajo a miles de personas al área durante una semana.

Al menos 38 personas que asistieron a la Fiesta de Invierno contrajeron la enfermedad. Tres hombres murieron por esa causa.