Desarrollan dispositivo con Inteligencia Artificial para la lucha contra el cáncer

Un investigador de la Universidad de Saskatchewan obtuvo en su país financiamiento federal para impulsar una investigación que involucra el uso de la llamada Inteligencia Artificial para combatir al cáncer.

Según informa Radio Canadá Internacional, el profesor Kahn Wahid se encuentra trabajando en el desarrollo de un dispositivo del tamaño de una píldora que, gracias a la IA, podría ayudar al tratamiento del cáncer gastrointestinal.

Un paso adelante

El dispositivo en cuestión, que actualmente se encuentra en la etapa de prototipo, busca suplantar a los procedimientos usados comúnmente en las endoscopias, cuando una cámara ubicada en la punta de un cable es introducida en el cuerpo del paciente, para obtener imágenes de la zona lesionada.

Por el contrario, el nuevo equipo permitirá rastrear con precisión todo el "viaje" intestinal de la cápsula inteligente, a través de minúsculos bio-sensores «inteligentes» inalámbricos. Los mismos tendrán a su cargo detectar y analizar las sustancias específicas producidas por la enfermedad, conocidas como biomarcadores, transmitiendo la información obtenida a una computadora.

De ese modo, los investigadores esperan poder aportar un procedimiento de diagnóstico más preciso, eficaz y menos invasivo.

Una menor manipulación de la zona afectada puede aportar calidad a la atención del paciente, sobre todo en casos como los tumores gastrointestinales, que suelen producir lesiones sangrantes.

Por otro lado, las cámaras incorporadas a esta nueva tecnología permitirían obtener imágenes de la totalidad del intestino delgado, que puede llegar a medir 10 metros y cuyo recorrido completo es prácticamente imposible con las actuales herramientas.
Ventajas evidentes

Según el doctor Wahid, responsable del proyecto, el SmartCap, como ha bautizado a la unidad, integra varias de las funciones habituales en un laboratorio, como la imaginería o la toma de muestras, por ejemplo de sangre.

Por otro lado, la tecnología de localización, los sensores tanto de fluorescencia como de espectro múltiple lumínico y la batería de mayor duración aseguran la exploración completa del sistema intestinal, mediante la obtención de imágenes de alta definición.

Los sensores de fluorescencia a bordo detectan el brillo de los tintes especiales que se inyectan en un paciente, que se unen a células cancerosas específicas, permitiendo la identificación del tumor y su ubicación en tiempo real. Por su parte, los sensores multiespectrales determinan la concentración de hemoglobina y la saturación de oxígeno de la sangre y, mediante el análisis del color de esta, los médicos pueden determinar si la hemorragia es activa, crónica o si se trata de coágulo.

El procedimiento hace uso de las técnicas de IA para mejorar la precisión del diagnóstico, al procesar la información obtenida por medio del llamado "aprendizaje profundo".

El aprendizaje profundo es un subconjunto del aprendizaje automático en la inteligencia artificial (IA) que tiene redes capaces de aprender sin supervisión a partir de datos no estructurados. También se lo conoce como aprendizaje neuronal profundo

En declaraciones efectuadas al periódico de la universidad donde se desempeña, Wahid expresó que "la nueva herramienta podría duplicar la tasa mundial de supervivencia del cáncer intestinal", al favorecer un diagnóstico más preciso y prematuro del desarrollo de la enfermedad en cada paciente.

El equipo liderado por Wahid sostiene que si las pruebas que se están llevando a cabo obtienen resultados positivos, el dispositivo podría ser usado en otras prácticas médicas en las que sea necesario "escanear" el interior del organismo de una persona.

También podría tratarse de una herramienta de utilidad para la exploración de sitios inaccesibles a la actual tecnología, como la exploración minera en grandes profundidades.

Estadísticas

Una cifra creciente de casos de cáncer gástrico se diagnostican cada año en todo el mundo y es la quinta forma de cáncer más frecuente.

Los cánceres de estómago se encuentran con más frecuencia en los países desarrollados.

En dichas naciones, el cáncer gástrico tiene 2,2 veces más probabilidades de ser detectado en hombres que en mujeres, mientras que en las naciones en desarrollo, esta proporción es de 1,83.

Según cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS), citadas por la Universidad de Saskatchewan, en 2018 se informaron 4,6 millones de nuevos casos de cáncer gastrointestinal en todo el mundo, que resultaron en 3,3 millones de muertes.

La mayor parte de los casos de esta variedad de cáncer se diagnostican cuando la enfermedad se encuentra en estado avanzado, mientras que la detección y tratamientos tempranos permiten una tasa de sobrevida del 83 por ciento.

Desarrollo final

La investigación del equipo del doctor Wahid, que también cuenta con investigadores de la Universidad de Calgary, obtuvo un importante respaldo al lograr financiamiento por 250.000 dólares, a través del "Fondo Nuevas Fronteras en la Investigación", instaurado por el gobierno canadiense.