En Perspectiva

La pilcha de la discordia

Coordinadora de ollas: remeras contra la LUC fueron “legítimas”, pero “no inteligentes”

"Comunicacionalmente no fue lo mejor porque reafirmaron el discurso que se intenta instalar de un prejuicio" contra las ollas, dijo Paola Beltrán, vocera de la Coordinadora popular y solidaria.

22.04.2021 13:52

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2021-04-22T13:52:00
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Por En perspectiva

El funcionamiento de las ollas populares, que aparecieron el año pasado en varios puntos del país para paliar las consecuencias económicas de la pandemia, quedó envuelto en una controversia en estos días.

El jueves de la semana pasada el Ministerio de Desarrollo Social anunció un acuerdo con la asociación civil Uruguay Adelante, a la que se le entregaron 65 millones de pesos para una primera etapa de compra de alimentos, logística y suministro a ollas populares y merenderos de la zona metropolitana.

El nuevo sistema generó molestia en la "Coordinadora popular y solidaria: Ollas por vida digna" que desde diciembre del año pasado venía trabajando junto al Instituto Nacional de Alimentación y la Intendencia de Montevideo para proveer comida a varias ollas. La coordinadora aceptó el acuerdo para trabajar con Uruguay Adelante, pero dejó sentada su protesta con lo que ve como una "tercerización" de la ayuda a las ollas.

En la mañana de este jueves, el periodista Emiliano Cotelo, conductor de En Perspectiva (Radiomundo) dialogó con Paola Beltrán, Vocera de la Coordinadora popular y solidaria: Ollas por vida digna, que agrupa a más de 150 ollas populares.

Cotelo comenzó preguntando si se trataba de un movimiento con intenciones ideológicas, además de solidarias.

"Además de dar comida, queremos pensar sobre el hecho de que estamos dando comida. Cuando uno se junta con otros que están dando comida sistemática durante meses a personas que son sus vecinos, lo que hacemos es pensar sobre eso. ¿Por qué pasa eso? ¿Por qué las ollas popular existen? ¿Por qué cada vez hay más gente que va a las ollas? ¿Por qué es la solidaridad entre vecinos la que tiene que afrontar una situación de crisis económica que surge a partir de un elemento que excede a la gente además de decisiones políticas y económicas que les impactan directamente?", expresó Beltrán.

El periodista consultó entonces si se trataba de una "movida de oposición al gobierno", algo que la entrevistada descartó.

"No. Lo nuestro es una movida solidaria. Es complicado cuando todo se trata de blanco o negro. Parece que cualquier cosa que ocurre tiene que ver con si le quiero contestar o no al gobierno. Nosotros hablamos de Estado, el Estado lo puede estar gestionando un gobierno de un color u otro, si hace las cosas mal las organizaciones sociales se lo tienen que decir", respondió, y agregó que "es este gobierno el que tiene que hacer que el Estado empiece a estar presente. Nuestro objetivo es que el gobierno se haga cargo de que hay una situación de emergencia y que la política social del Mides no puede ser eternizar las ollas populares".

En este sentido, Beltrán dijo que la política del Mides "no puede ser darle el número de una olla popular para que la gente vaya a comer. Eso no es correcto, las personas tienen que comer en su casa, tienen derecho y para eso el Estado tiene que tener respuestas que atiendan a esa situación".

"La realidad es que recién ahora el Mides decide hacer un trabajo en relación a los 200 millones que se había prometido hace tiempo y lo hace de una forma que no es la mejor", criticó.

Cotelo preguntó, entonces, cómo se entendía la aparición en un informativo de integrantes de una olla que adhiere a la coordinadora con remeras contra la ley de urgente consideración (LUC).

"La Coordinadora Popular y Solidaria estuvo participando en las discusiones sobre la LUC en la Interosocial. En ese momento definimos que consideramos que la LUC es una ley muy complicada, que la mayoría no teníamos idea de lo que decía, pero que sin embargo si sabíamos que afectaba una cantidad de derechos y de formas de funcionamiento que tenemos en la sociedad, y que por tanto era deseable que se junten las firmas", respondió.

De todas formas, aclaró que no están llevando las ollas "para tener un cargo en ningún lado ni para conseguir votos".

"Comunicacionalmente no fue acertado el movimiento que se hizo. Veníamos saliendo en los medios de comunicación con respeto y apertura al diálogo, nunca dijimos que no íbamos a discutir con el Mides o Inda, y de repente, nos transformamos en una cosa mala que hace política partidaria y se aprovecha de la gente que va a las ollas. Es feo eso, no está bueno", dijo.

Cotelo aclaró que fue la propia olla la que se puso en esa situación al aparecer con las remeras contra la LUC, pero Beltrán aseguró que "viene de antes el ataque a la coordinadora".

"No fue inteligente a nivel comunicacional pero fue muy legítimo y válido por parte de los compañeros que tienen todo el derecho del mundo a ponerse una remera contra la LUC. Vienen sacando la olla desde el principio, no cayeron de un paracaídas ni un extraterrestre, son compañeros que vienen trabajando en esa olla sistemáticamente, han dejado la vida y han alimentado a un montón de personas que, de lo contrario, no se hubieran alimentado", declaró.

"Esas personas tienen todo el derecho a expresarse y no puede ser que si un colectivo de vecinos que vienen trabajando hace un año, se ponen una remera contra la LUC, sean objeto de las agresiones más tremendas, en el teléfono que habían dado en vivo recibieron amenazas", lamentó la entrevistada.

En este sentido, dijo que hay "una responsabilidad muy importante de no fogonear ese tipo de reacción, de no salir al vuelo a estigmatizar, poner etiquetas, porque cuando el discurso está polarizado, se mueven cosas feas en la gente, mueve violencia".

"Comunicacionalmente no fue lo mejor porque veníamos de ese tema, salen las remeras de la LUC y fue como 'vieron, les dijimos'. Reafirmaron el discurso que intentaba instalar un prejuicio sobre una organización social", sentenció sobre el tema.

El apoyo del Mides y las "diferencias" con Uruguay Adelante

La segunda parte de la entrevista estuvo centrada en el apoyo del Mides a las ollas populares y la decisión de hacerlo mediante la ONG Uruguay Adelante, que no recibirá plata, sino que será quien se encargue de centralizar los apoyos y la logística de forma voluntaria.

La vocera de la Coordinadora popular y solidaria señaló que, aunque no aprobaron el formato, aceptaron el apoyo porque "cuando hay necesidad, no hay posibilidad de elegir".

La vocera explicó que "la lógica de Uruguay adelante es otra y no fue posible trabajar en conjunto".

"Hay una lógica del uno a uno: Yo con la olla. La coordinadora es el colectivo", aseguró.

"Nosotros cuestionamos que el Mides, pudiendo trabajar con la organización social, que fortalece el tejido social, decidiera entregar ese dinero directamente a Uruguay Adelante, que es muy nuevita, y que esas compras queden a cargo de esa ONG, una tercerización", criticó.

Además, aseguró que "no hubo ninguna licitación ni llamado": "No sabemos si el Mides ha informado cómo resolvió que es esa ONG y no otra la que gestiona los alimentos. Cuando se entrega ese volumen de dinero no se hacen designaciones directas Nos parece un poco desprolijo".

Cotelo recordó las palabras de Jesús Graña, uno de los referentes de la institución, que entrevistado en En Perspectiva, explicó que Uruguay adelante "fue la única institución que presentó un proyecto como tal para asistencia de ollas".

"Las personas que trabajamos en Uruguay adelante somos de perfil técnico, de adentro de la gastronomía, elaboramos un proyecto en el que primero entendimos la realidad de las ollas y con esa realidad armamos cuál sería el ideal de la comida. En julio, agosto y diciembre presentamos al gobierno diferentes tipos de planes para atender esta emergencia rápidamente", recordó Cotelo las palabras de Graña.

Beltrán replicó que desde la coordinadora "también hay montada una estructura que dio alimentación durante todo el año pasado a ollas populares, con 14 puntos logísticos".

"Nosotros no escribimos un proyecto con el objetivo de que el Mides nos diera dinero porque nunca quisimos que el Mides nos diera dinero. Lo que queríamos es que se hiciera lo mismo que con la intendencia. No venimos del mundo de los negocios ni somos técnicos del marketing, somos vecinos y vecinas militantes sociales que estamos en la vuelta y nos organizamos e hicimos lo mejor que pudimos", manifestó.

"Nosotros no damos el dato de la gente que va a las ollas. Si el Estado quiere la identidad de las ollas, que contrate a compañeros que ha despedido sistemáticamente de todos los programas del Mides que trabajan en territorio para que hagan el relevamiento", añadió.

Consultada entonces cuál era el problema de la situación, la entrevistada dijo: "El problema es cuando esa estructura (Uruguay Adelante) hace debilitar a la otra. Yo le voy a creer a las ollas. Las ollas lo que plantean es que hubo un trabajo sistemático de Uruguay Adelante de tomar las ollas que estaban en la coordinadora popular y solidaria para poder tener un número grande de representación de ollas y eso no se hace".

Beltrán aseguró que "hubiera estado bueno" que el Mides trabajara con la coordinadora: "Con mucho gusto lo hubiésemos hecho para fortalecer el tejido social y trabajar en conjunto para ver como superamos la situación concreta de la olla y empezamos a trabajar en otra cosa. Estábamos dispuestos a poner nuestro trabajo, nuestro conocimiento y nuestra experiencia, y el Mides elige trabajar con una ONG, que tiene todo el derecho, (pero) cuestionamos que no hubo un llamado y que trabaja de otra manera, con la individualidad".

Por último, Cotelo le consultó sobre los montos asignados por el Mides, un máximo de 200 millones en el correr de 2021.

"El estudio de Facultad de Ciencias Sociales en conjunto con Aebu, dio cuenta que entre marzo y julio de 2020 se invirtieron 300 millones en ollas populares de dinero solidario. La inversión que está haciendo el pueblo es histórica, la inversión que está haciendo el Mides no", concluyó.


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