Un hecho que encendió las alarmas en Peñarol se dio sobre el cuarto de hora inicial del duelo ante Racing en el Parque Viera, ya que su arquero Washington Aguerre debió ser reemplazado a una semana del clásico ante Nacional.

El jugador que chocó primero con Magallanes tratando de salir rápido con un balón largo, luego terminó en el piso con claros gestos de dolor.

Allí ingresó la sanidad aurinegra y se notó claramente, mientras se tocaba insistentemente el aductor, que le decía al doctor: “Me pinchó un poco”.

El mensaje llegó de la sanidad al cuerpo técnico y Diego Aguirre no dudó y mando a Guillermo De Amores a la cancha, en su debut oficial en la temporada.

Aguerre salió tomándose al cabeza y muy preocupado, ya que el domingo 24 se juega el clásico ante Nacional en el Campeón del Siglo y dependiendo la entidad de la lesión muscular, es muy probable que no pueda estar presente.