El pasado 16 de noviembre, Uruguay pegó fuerte en La Bombonera y le sacó el invicto al campeón del mundo, Argentina, al ganarle 2-0 por la quinta fecha de las Eliminatorias para el Mundial de 2026. Más allá de los goles de Ronald Araujo y Darwin Núñez, el partido quedó marcado por el gran juego de la Celeste, que no se achicó y luchó.

En el primer tiempo, luego de una falta sobre Maximiliano Araújo, los jugadores de ambos equipos comenzaron a empujarse y los argentinos fueron más allá, ya que Lionel Messi y Rodrigo de Paul agarraron del cuello a Mathías Olivera, quien trababa de defender a su compañero. “Fue un cruce que se inicia con una pelota que la tiene el Papo Araújo, se la intentan sacar y se arma un borbollón, y hay que ayudar a los compañeros, estar ahí y no intimidarse por nada”, dijo Olivera.

“Era un momento lindo para dar un par de empujones. Son cosas que pasan en el partido y una vez que se termina vuelve todo a la normalidad”, dijo en diálogo con La cocina de Kesman, que se emite por YouTube. “En el momento no me di cuenta”, indicó del agarrón de cuello de Messi, y añadió: “Después vi la foto que hay en la que me agarra del cuello, pero en el momento, con la inercia y la calentura del momento, ni cuenta me di”.

Y agregó: “El uruguayo tiene que estar ahí, más en estos partidos, que había que meter mano dura un poco, pero lo importante es que al final ganamos y eso es lo que vale”. “Son cosas del partido. Son jugadas que uno tiene con otro jugador. Yo lo tuve que marcar todo el partido y son cosas que uno las tiene con cualquier otro jugador en cualquier partido, son circunstancias del partido. Una puteada u otra: no va más allá de eso, siempre con respeto”, cerró.