Kevin Méndez, futbolista de Peñarol, fue entrevistado por el programa Último al arco, de radio Sport 890, e hizo referencia a la victoria aurinegra frente a Sud América por Copa AUF Uruguay, la rabona de Bruno Betancor en dicho partido, lo próximo que tendrá el Carbonero a nivel de encuentros y los equipos que mejor juegan en el campeonato, entre otros temas.

El atacante, de 27 años, comenzó analizando el triunfo ante el Buzón, que determinó el pasaje del Mirasol a octavos de final de la competencia que une a las distintas divisiones del Uruguay: “Era un desafío para nosotros seguir con una racha positiva, por lo que estamos contentos tras ganar. Me tocó jugar todo el partido y marcar. Formamos con un equipo mixto. Al no llover y al estar el pasto tan alto, resultaba casi imposible conducir la pelota. Se hizo pesado, hacía mucho calor, y siempre son difíciles de llevar las temperaturas altas. Fue un partido en el que se requirió mucho esfuerzo. Intentamos salir antes al calentamiento, para dar los pases más fuertes y adaptarnos”.

Acerca de la rabona del juvenil aurinegro, quien causó el enojo de los futbolistas rivales, mencionó: “Todavía no pude hablar con el Bola [Bruno Betancor]. En la cancha me enojé mucho, porque le pedí que terminara la jugada en gol, ya que le había dado el pase. En el video que vi, no logré descifrar si lo usó como recurso o si tenía en la cabeza eludir al arquero y pegarle así. Darío [Rodríguez] le dijo que se mantenga tranquilo, ya que, si lo utilizó como recurso, estaba bien. Él tiene una manera bastante particular de jugar. No debe haber pasado por su cabeza ni sobrar ni cancherear, debido a que ese no es el estilo de este grupo. Si hubiera estado del otro lado, no me hubiese enojado, ya que son cosas del fútbol”.

Con respecto a los futuros duelos del Carbonero y los equipos a resaltar en el torneo, comentó: “Son partidos bisagra. El encuentro ante Liverpool nos va a marcar mucho. Es un rival muy exigente que nos viene corriendo desde atrás, por lo que va a ser una prueba linda para nosotros. Es el equipo que mejor juega en el campeonato, junto con Defensor Sporting. Este último, por un tema obvio, se ha visto desmantelado, ya que le sacaron muchos jugadores, pero Liverpool viene de hace mucho tiempo con una manera de trabajo, muchos chiquilines del club, una idea que lleva a cabo y un técnico que está hace años”.

Y agregó con relación al enfrentamiento del próximo domingo ante los Negriazules, fijado para las 20:00 horas en el Estadio Campeón del Siglo: “Imagino que, en su cabeza, acortar la ventaja en la Tabla Anual y pasarnos en el Clausura los pondría en un muy buen camino, teniendo en cuenta que nosotros vamos a tener el clásico de visita en la siguiente fecha. Tenemos un plus al jugar en nuestra casa, con nuestra gente”.

Sobre la actualidad mirasol, Méndez afirmó: “Nos encontramos en una racha positiva desde el punto de vista de los resultados, aunque, en algunos duelos, hemos estado en el debe con el rendimiento. Creemos que, con el equipo y la clase de jugadores que tenemos, podemos jugar mucho mejor, pero también es verdad que en el fútbol uruguayo se empareja todo y cuesta todo mucho más. Es positivo llevarse los tres puntos cuando no jugás bien. Estamos con confianza, pero, de todas maneras, intentando mejorar un montón de cosas, respecto a lo futbolístico y el manejo de los partidos”.

El oriundo de Trinidad también se refirió a su posición dentro del campo de juego: “Mi lugar es de enganche, de diez, por adentro, atrás de un delantero o de dos. Darío [Rodríguez] lo sabe muy bien, porque me conoce, ya que cuando subí a Primera él era uno de los referentes del plantel, y yo siempre jugaba ahí. En mis inicios, en formativas, era el típico diez clásico, más posicional y que esperaba a que le llegara la pelota. Fabián [Coito] me ayudó mucho a liberarme por todo el frente de ataque, producto de que el fútbol cambió y es más dinámico”.

El futbolista concluyó opinando acerca del arquero Thiago Cardozo: “Lo veo muy bien. Si bien no tuvo trabajo, se lo vio seguro. Él y el Vasco [Aguirregaray] son nuestros capitanes y ambos son positivos, ya que siempre están ayudando al equipo, pese a jugar o no. Cuando me consultó por la posibilidad de irse a Chile, le dije que no lo pensara, que era una oportunidad para él de ir al exterior y poder mostrarse, y que la chance era tanto de un buen equipo como de una buena liga. El pase no salió, pero él no cambió la manera de entrenar y continuó igual”.