Un polémico festejo de gol está dando la vuelta al mundo. El protagonista de este fue el jugador iraní Mehdi Taremi, que defiende los colores del Persepolis iraní.

Tras anotar un penal (que picó de gran manera), el futbolista arrancó a correr y a su vez hizo un gesto simulando una decapitación.

El gol, que le dio la victoria al equipo de Taremi ante el Al-Nasr del ex Peñarol Fabián "Lolo" Estoyanoff, sucedió en el contexto de la Champions League de Asia.

Dicho comportamiento cayó mal en Medio Oriente, donde las "bromas" de ese tipo no son bien vistas debido a la complicada y tensa situación que vive esa zona del mundo.

La rabia, sumado a las repetidas veces que hizo el violento ademán, dan a suponer que el futbolista incitó a la violencia de manera intencional; una actitud que no pasó, pasa ni pasará desapercibida en su país.