El Colegio de Árbitros de la Premier League (PGMOL, por sus siglas en inglés) reconoció que la acción de André Onana, arquero del Manchester United, en la que se llevó por delante a un jugador del Wolverhampton Wanderers, debería haber sido castigada con un penal.

El meta del United, que debutaba, dio un golpe de puño al intentar despejar un balón en los últimos minutos y, pese a que la acción fue revisada por el VAR, no se concedió la pena máxima al equipo visitante, que acabó perdiendo 1-0 por culpa de un gol de Raphael Varane.

ESTO NO FUE PENAL PARA LOS WOLVES... ¿QUÉ TE PARECE?

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— SportsCenter (@SC_ESPN) August 14, 2023



Gary O'neill, director técnico del Wolves, reconoció en la rueda de prensa posterior al partido que Jon Moss, director del PGMOL, le pidió perdón por no haber concedido la pena máxima.

“Acabamos de hablar con Moss y le agradezco que haya venido, que se haya disculpado y que haya dicho que era un penal claro que se tenía que haber pitado. Le agradezco que haya admitido que era claro y que no se podía creer que el árbitro no lo viera y que el VAR tampoco”, dijo el técnico del Wolves.

“Probablemente solo me haga sentirme peor, porque una vez que sabes que tenías razón, te sientes peor por irte sin nada”, añadió.

EFE / FútbolUy