Carlos de Pena lleva casi tres años defendiendo los colores del Dinamo de Kiev, club al que llegó en abril de 2019 y con el que registra 19 goles en 102 partidos oficiales. Se encontraba a gusto en la capital de Ucrania hasta hoy, cuando amaneció con los bombardeos rusos ordenados por el presidente Vladimir Putin.

“La situación es grave y estoy acá en Kiev. Mi familia gracias a Dios está en Uruguay. Sólo les pido que recen y todo va a salir bien”, escribió en sus redes sociales el zurdo mediocampista de 29 años, quien no cuenta con la posibilidad de acudir a una embajada o consulado en Ucrania. La que tiene jurisdicción sobre ese país es Marcela dos Santos, cónsul en Rumania concurrente en Ucrania.

A De Pena se lo vio en un video publicado en redes sociales junto a un grupo de futbolistas brasileños tanto del Shakhtar Donetsk como del Dinamo de Kiev, los dos rivales históricos, solicitando a las autoridades brasileñas ayud a para poder dejar el país junto a sus familias.