Este martes, Palmeiras quedó eliminado de la Copa Libertadores tras empatar 2-2 con Athletico Paranaense en semifinales, y luego del partido, el entrenador del Verdão, Abel Ferreira, fue duro con el árbitro del partido, el uruguayo Esteban Ostojich.

En el primer tiempo, Alex Santana, de Paranaense, golpeó con el codo a Rony y Ostojich le mostró la tarjeta amarilla, generando la molestia de los locales, que pidieron la expulsión del volante.

Con respecto a eso, dijo en conferencia de prensa que "es la primera vez en la historia que veo una tarjeta amarilla por una agresión". Pero agregó que no se iba a detener en eso.

Sin embargo, aseguró que el arbitraje "no fue igual para los dos lados, hubo criterios diferentes, no sé por qué, no entiendo". "Me gustaría que el árbitro entrara (al vestuario) a hablar con mis jugadores, solo eso", agregó.

Por último, cerró diciendo que "nuestro equipo con diez hizo de todo, incluso el 2-0. Esto es jugar con nuestro trabajo y no podemos jugar cuando tenemos acceso a las imágenes del VAR. No diré lo que estoy pensando".