La lucha contra la sal ha ganado protagonismo en varias partes del mundo y son varias las organizaciones que se han embanderado con el asunto. Y un grupo de científicos japoneses se propuso no quedarse atrás e inventar algo que ayude a prevenir los problemas que puede causar el consumo excesivo de sal, y, a la vez, encontrar la manera de que ese "sabor salado" pueda seguir estando en las comidas.
Muchos gustan de comer las cosas y que estén saladas. O por lo menos disfrutan que la comida tenga sal, debido a la maximización de sabores que el sodio ocasiona.
Así, inventaron un tenedor eléctrico capaz de generar descargas eléctricas sobre la lengua que detonen una percepción salada de sabor, según recoge FayerWayer.
La idea de este "juguete", desarrollado por el Rekimoto Lab de la Universidad de Tokio, es muy elemental: el usuario prepara cualquier alimento con el mínimo o nada de sal, lo ingiere con el tenedor y en cuanto las puntas hacen contacto con la lengua, se estimulan las papilas gustativas mediante descargas eléctricas, para generar una sensación salada.
El tenedor podría llegar a tener un costo de producción que no superará los USD $18,00. Su sistema, además, podrá simular los sabores amargos, por lo que podría aplicarse a una amplia variedad de platos.
¿Llegará un tenedor que genere la sensación de dulzura?