El estudio, divulgado por la agencia Ansa, señala que los perros de raza están sufriendo cada vez más enfermedades genéticas, debido a los años de apareamiento entre sí, con el fin de "mejorar las razas".
Razas como el cocker spaniel, que nacen con cerebros muy grandes para sus cráneos, o boxers, con problemas de epilepsia, son algunos de los problemas a los que se enfrentan los especialistas. Según el informe, los propietarios de estos animales priorizan el aspecto físico de los canes, en detrimento de su salud.
El Kennel Club, una institución dedicada a la regulación de las normativas de razas caninas, trabaja "sin descanso" para mejorar la salud de los perros. En el Reino Unido, un 75% de los 7 millones de canes es de raza, y sus propietarios invierten unos 20 millones de dólares semanales en cuidados veterinarios.